Jueves reflexivo: risa

 Reflexión del jueves: risa

Hola a todos y bienvenidos un día más. Ya es jueves, la semana vuela, y es el momento del post reflexivo. Los lectores habituales sabéis que escribo estos post sobre la marcha y sin corregir, así que de antemano pido perdón por los fallos que pueda tener. Y sin más rollo, empezamos.

En estos días en los que hay tantas tragedias y tantas tristezas, siempre recurro a la risa. Con esto no quiero decir que no me preocupe lo que está ocurriendo, que aún no hemos salido de una pandemia y tenemos una guerra. Además de muchas otras cosas que suceden a mi alrededor. Claro que me preocupa,  pero no puedo estar todo el día con pensamientos trágicos. Y para esos casos viene muy bien la risa.

Ya conté por aquí en alguna ocasión que cuando yo era pequeña vivía en una zona que se vio muy afectada por la reconversión industrial. En mi familia, afortunadamente, no lo vivimos, pero muchos vecinos sí. Además había daños colaterales, pues si hay una crisis en las familias los negocios lo sufren: las tiendas de barrio, los bares...

Y en aquella época la tristeza se palpaba en el ambiente.

Una de aquellas noches emitieron en la tele, en una de las dos únicas cadenas que había, una obra de Lina Morgan.

Pues el otro día, hablando con mi hermana, recordamos aquella noche. Desde nuestro salón oíamos risas en toda la calle. Y puede parecer una bobada, pero era una sensación indescriptible. 

Al día siguiente la gente estaba más animada. Las conversaciones en las tiendas eran más alegres, y aunque los problemas seguían estando, la gente estaba mejor y tenía más fuerza para afrontarlos.

Hace poco volví a ver algunas obras de Lina Morgan y claro, todo ha cambiado y no nos reímos de las mismas cosas, pero en aquel momento fue un bálsamo, un refugio para todo un barrio. Y esas risas que sonaban en la.calle las tengo grabadas en mis recuerdos.

Uno de mis primos es especialista en hacer reír. Nos reímos con él siempre, pero cuando coincidimos en funerales o en hospitales es el encargado de animar. Y cuando tenemos un día duro mi marido siempre me dice que lo llame porque sabe que un par de horas con él nos arreglan un mal día. Y ojo, él también sufre, y siente y padece. Pero lo sabe llevar.

Hace unos cinco años también hice un post sobre la risa, fue después de un encuentro con Les Luthiers, y os dejo un vídeo. El primer minuto se oye regular, no quería molestar y lo grabé como pude.

Pues en esos días opinaba un poco lo de ahora, si no nos tomamos las cosas con humor la situación nos acabaría superando.

A mí, por ejemplo, me encanta el cine de misterio, los thriller, las pelis de acción, los dramas, el cine clásico...pero al final del día busco desconectar y reírme. Sólo eso. Nada más, y nada menos que eso. Y es cuando elijo cosas como alguna serie de esas cortas y sin nada especial que puse en el post del martes. O veo videos graciosos. O vuelvo a ver clásicos tipo "No me mandes flores", "con faldas y a lo loco", "¿Qué me pasa, doctor?", "Descalzos por el parque " o "Una noche en la ópera". Mi mente necesita relajarse.

Y aunque mantengo conversaciones de todo tipo, y la actualidad es importante, me niego a estar todo el día hablando de cosas malas. Intento valorar lo bueno, y disfrutarlo. No quiero que todo se centre en cosas negativas. 

Y eso lo hago con mi hermana y nuestros WhatsApp tontos. 

El otro día me regaló dos pantalones de chándal para los paseos perrunos. Y yo no soy mucho de chándal. Entonces ella se tronchaba imaginando mi look con chándal y blusa, jejeje, y me amenazaba con comprar una riñonera a juego, que sabe que las riñoneras y yo no nos entendemos. Es una chorrada y puesta aquí pierde gracias, pero nos reímos bastante.

La otra conversación es en referencia a Barrio Sésamo, los que conozcáis la canción de Yo y mi llama me entenderéis, jajajaja. 

Quise decir Carmena y puse Carmona, jejeje

Bueno, pues me despido diciendo que no hay nada tan bonito como la risa. A veces los días son muy negros, y no podemos volverlos de colores por mucha risa que derrochemos, pero sí que podemos hacer que sean gris claro, y quizás con reflejos morados, o azules hasta que poco a poco vuelvan los colores a nuestra vida.

Muchísimas gracias por leerme y nos vemos el sábado en el resumen semanal y como siempre traeré algún especial.

Muy feliz jueves.