jueves, 24 de noviembre de 2022

Historias que tienen un final II

 Reflexión: historias que tienen un final

Hola a todos y bienvenidos un día más. ¿Qué tal va la semana? La mía un poco de locos, pero ya tengo el finde cerquita para descansar, además llega una amiga que estaba fuera.

Todavía no ha amanecido aunque ya se adivina la cercanía del alba, así que con un café muy caliente, empezamos.

reflexion


Hoy vengo con un post improvisado, aunque la idea la tuve ayer, la verdad. Hace un año, más o menos, compartí aquí un par de historias de esas que nos acompañan y están inconclusas, y con el correr de los años, de manera accidental, descubrimos que han tenido un final. La idea para el post de hoy se me ocurrió mientras estaba leyendo el periódico, pues me topé con el protagonista de la historia que os conté aquí. Al parecer mi particular San Nicolás no es extranjero, es asturiano.

Nos dice el reportaje que vivió durante muchos años en el barrio donde yo crecí, solo unas calles más abajo, así que seguramente coincidimos muchas veces. Al parecer tenía en su casa tenía unos 5000 libros (yo voy camino), 6000 discos (a mí me falta mucho), dos armarios llenos de ropa y lo que pudiera necesitar. Fue técnico turístico y trabajó bastante en las islas (Canarias y Baleares) y en 2008 regresó definitivamente a Asturias. A partir de ese momento empezó a perder amistades, a desencantarse y aislarse. Luego estuvo viviendo en otro barrio y no le gustaba nada la gente que le acompañaba así que desde 2021 vive en la calle.

La verdad es que salta a la vista que es una persona culta, y se ve amigable. Dice el reportaje que se ha hecho amigo de trabajadores de la zona, y que le gustaría tener una casa. También añade que ha perdido las expectativas de vida. Al leerlo no dejo de pensar en lo curiosa y confusa que puede ser la vida. A veces lo tenemos todo y no sabemos muy bien qué hacer con ello.

san-nicolas
Es la foto del periódico pero pierde mucho, yo lo veo leyendo y con trenca y el gorro de fieltro


Y en relación a tenerlo todo y no valorar os confieso que últimamente me he enganchado en youtube a unos vídeos de decoración de unas casas en México que son diminutas, pero diminutas. Hay dos canales en concreto, uno de un chico y su novio y otro de una mami con su marido y dos hijos, que me atrapan, sus casas son tan tan básicas y ellos las mantienen y decoran todo con una ilusión...

En un vídeo la madre va a comprar dos sartenes y es una celebración, y las cuida tanto que me sentí una superficial. Yo, al igual que la mayoría de mis lectores, tengo bastantes sartenes y ollas, la verdad es que tenemos de todo, o más bien de más. Yo lo cuido, de hecho mis ollas y sartenes preferidas eran de mi abuela, pero si se me estropea una sartén me compro otra, en cambio para ellos es un lujo. 

En otro vídeo la pareja de chicos compra unos platos y unas tazas y las ponen en un mueble tan contentos...Y yo tengo un armario y parte de otro lleno de tazas y no las valoro como ellos (las valoro, pero no de esa manera). Vale, estoy divagando, pero conocer la historia de este señor me ha hecho pensar en lo fácil que es a veces "perder el rumbo". Tiene que ser durísimo no saber qué dirección tomar, y de pronto coger tus cosas y quedarte en la calle. Este señor se ve culto, y con inquietudes, y ahora parece que su única salida es leer en una terriza vacía por las noches.

Pero no todo tiene un final, hay otra de mis historias que sigue inconclusa, la del peregrino misterioso que compartí aquí. No sabemos nada, aunque hemos avanzado y ahora nos saluda. Va siempre con ropa muy holgada y en vez de un enorme crucifijo lleva dos, que están hechos a mano, uno suele llevarlo bien sujeto, y el otro colgando. Y lo curioso es que va sonriente, concentrado, pero con cara de felicidad. Quizás algún día, si el coche no está en marcha, después del saludo, nos animemos a hablar del tiempo, para romper el hielo. Y así, tal vez, nos cuente algún día su historia, aunque cada vez tenga más claro que es alguna especie de promesa.

Bueno, me voy que me he enrollado un montón. Antes de irme os doy las gracias por todas las felicitaciones por mi nueva novela, no solo aquí, también en redes sociales y por mensajes privados.

Mil millones de gracias y nos vemos el lunes.

Muy feliz finde.

20 comentarios:

  1. Es verdad lo que comentas de las sartenes, vivimos en un mundo de usar, gastar y tirar y ya no tomamos apego a casi nada. Me has dado curiosidad con lo de los libros, un día tengo que contar los míos.
    Besos.

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    1. Hola.
      Seguramente cuando los cuentes te sorprenderás. Yo lo hice al hacer mi biblioteca y me sorprendí, muchos estaban repartidos por la casa, más los de mis padres, mi tío...
      Muy feliz día.

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  2. Cuando llegué a los 2000 me amenazaron con salir o yo o los libros, así que tuve que tomar una decisión, desde ese momento leo en electrónico y de vez en cuando cae un libro en papel.
    Conozco varios casos como el que nos cuentas, uno de ellos murió en la calle y desgraciadamente lo vimos como dia a dia se iba deteriorando, era joven.
    Saludos

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    1. Hola.
      Esa amenaza en mi casa no cabe, jajajaja. Obviamente tuve que renunciar a otras cosas, por ejemplo un salón convencional, todo tengo lleno de estanterías y vitrinas, y no veas el trabajo que da mantener un mínimo de limpieza.
      Qué pena ver a alguien deteriorarse, este señor parece que no tiene malos hábitos y si al final consigue una casa, supongo que tendrá una vida relativamente normal.
      Muy feliz día.

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  3. Creo que mientras vives tu historia está inconclusa, y así tiene que ser. Decidir que alguien no valora lo que tiene en base a nuestra forma de entender el mundo al final no deja de ser un prejuicio. Quizá sí lo valoró, pero no de la misma forma que otras personas. Quizá lo que para otros era valioso a él le asfixiaba. Eso no se puede saber sin preguntar a la persona, y a veces, ni preguntando. Besos!

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    1. Hola.
      A ver, no es que sea literal, obviamente yo no sé lo que valoran o no los demás, pero sí que estamos en una sociedad de consumo rápido y pasamos de una cosa a otra en segundos. Aquí normalizamos el sustituir una cosa por otra, y en otros sitios lo cuidan, lo arreglan y lo valoran
      Mil gracias por leer y comentar.
      Feliz día.

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  4. Con lo que me gusta la comodidad, no puedo imaginar nada peor que vivir en la calle. Ni siquiera soporto ir de camping cuando viajo. Prefiero un hotel aunque sea barato y básico. Qué podría pasarle a ese hombre para que decidiera vivir en la calle tras tener su casa con sus discos, libros etc. Es cierto que no sabemos apreciar lo que tenemos de tanto como tenemos.
    Un beso.

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    1. A veces no apreciamos lo que tenemos pero es por tener demasiado. Un beso

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  5. Curiosas historias y muy entretenidas, me he pasado un buen rato viendo todas ellas. Un besico y feliz finde

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  6. Hay historias que es mejor dejarlas sin final!

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  7. Seguro que con este señor que duerme en la calle encontrarías un buen argumento para tu siguiente libro.
    Buenas noches y ya casi buen finde.

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    1. Se me ha cortado, decía que por lo que he leído parece que tuvo una vida interesante.
      Muy feliz finde.

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  8. está claro que se puede ser feliz con poco. hay personas que viven en barrios humildes y tienen trabajos sencillos, y siempre están contentas.
    ahora bien, que otras personas desarrollen algún problema mental y puedan acabar en la indigencia, creo que se debe a causas un poco más complejas que no valorar lo que tienen...

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    1. Hola.
      Yo creo que hay muchas formas de ser feliz, y con poco se puede, pero claro, con un poco relativo, necesitamos agua en casa, luz, un mínimo de cosas...
      Obviamente la salud mental no tiene que ver, pero sí que creo que a veces estamos tan llenos de cosas que lo damos todo por sentado, y no debería ser así. Ayer mismo estaba cambiando unos armarios de la cocina y vi la cantidad de tazas que tenemos (llevo años coleccionando) y me he prometido darles valor, que ya se lo daba, pero valor de verdad, que lo damos todo por hecho. En mi casa, y en la mayoría, tenemos un montón de ropa, de zapatos, de bolsos, y nos parece normal y no pensamos que no hace tanto la gente tenía un abrigo, o con suerte dos, uno para los días de semana y otro para domingos.
      Madre mía que rollo te acabo de soltar, jajaja.
      Muy feliz finde.

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  9. Cierto, y eso hay que mejorarlo.
    Muy feliz finde.

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  10. Hay gente que con muy poco es feliz y otras que, aun acaparando un montón de enseres, sigue insatisfecha. Más rico es quien menos necesita que quien más acumula.
    Un abrazo y que pases un buen finde.

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  11. No somos conscientes de lo que tenemos, de nuestro egoísmo, hasta que algún contratiempo nos pone los pies en el suelo. Somos afortunados y privilegiados.

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  12. He pasado un rato fenomenal leyendote😊 buen finde 🌷🍁🌞

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