jueves, 24 de febrero de 2022

Reflexión: perder el tiempo

 Jueves reflexivo: perder el tiempo

Hola a todos y bienvenidos un día más. Ya estamos a jueves y toca el post improvisado. Hoy se me ha ocurrido hablar del tiempo, o más bien de perder el tiempo, algo muy mal visto y que, si lo analizamos, tampoco está tan mal. Y ahora sin más rollo, empezamos.

 

La verdad es que esto de perder el tiempo para mí tiene dos enfoques: uno es cuando hablamos de perder el tiempo porque no estamos haciendo nada útil, y el otro es cuando nos lamentamos porque hemos invertido mucho tiempo en algo y no ha salido como esperábamos y sentimos que hemos perdido el tiempo.

Respecto al primero, yo creo que  es algo que tenemos arraigado. Yo misma, hasta no hace mucho, me "obligaba" a hacer siempre algo útil.Me costaba dejar el timepo pasar sin más. Yo no duermo siesta porque no me gusta y me sienta fatal (un minisueño viendo algo de sobremesa de vez en cuando cae), y sentía que así perdía la tarde. Pues no señor. No me gusta, pero si alguien duerme por la tarde no pierde el tiempo, está descansando. 

No hacer nada, o no hacer nada útil es sano y saludable. A ver, sin caer en los extremos. No es plan de dejar la vida pasar. Pero si un día estamos cansados o no nos apetece hacer algo que no es imprescindible (no hablo de trabajos u obligaciones varias) no se acaba el mundo. Y esto lo noté mucho durante el confinamiento.

Ya sabéis que el primer mes estuve enferma, más de 18 días sin bajar de 39º de fiebre, más el duelo horrible...Pues esos días no los cuento. Pero cuando ya estaba mejor veía a la gente en redes limpiando, ordenando, haciendo deporte, preparando repostería...y yo, que nunca he sido capaz de parar en casa y que lo de estar sin hacer nada no iba conmigo necesité mis tiempos. Sí que hice un poco de repostería, pero un poco. Y ordené una parte de la biblioteca, pero a ratitos. Pero vi series y aproveché para no hacer nada.

Mis suegros siempre fueron personas muy muy activas. Mi suegro plantaba, hacía vino, sidra, participaba en concursos de baile, ayudaban a los hijos y nietos...

Pues a última hora su salud se resintió, y pasaban parte de la tarde en unos bancos charlando con amigos. Al principio a él eso de no hacer nada le agobiaba, pero luego aprendió a disfrutarlo. Y se reía y hablaba de esto y de aquello. A veces se unían a la fiesta mis tíos por parte de padre y mi tío por parte de madre, y hasta mi madre a veces, y una de mis vecinas de la infancia. Y empezó a disfrutar de no hacer nada. Como le decíamos todos, bastante había trabajado, desde los seis años.

A veces tenemos que estudiar, por ejemplo, y estamos saturados de problemas o de otras cosas. Pues no pasa nada porque un día "vagueemos". Yo era de las que si no estudiaba estaba con culpabilidad y desaprovechando ese día de relax. Pues no, a disfrutar de ese día y luego lo cogemos con más fuerza. 

Y perder el tiempo sin hacer nada, con las personas que quieres a tu lado, sin más, es un regalo de la vida.

Yo no suelo ver la tele, y el otro día se me ocurrió ver la entrevista que le hizo Bertín Osborne a Ana Obregón. No veo el programa y no sé que me imaginé, pero al ver que contaba lo morboso y el sufrimiento de su hijo me puse malísima y lo quité, fue superior a mis fuerzas. Pero en el trozo que vi ella insistía en disfrutar con las personas que nos importan, en pasar tiempo con ellos. Y eso es lo que trato de hacer desde hace mucho. Podemos pasar una tarde productiva o una tarde sin hacer nada, no importa en realidad lo que hagamos, lo importante es disfrutar de estar juntos.

Y respecto al segundo enfoque, yo creo que no hay tiempo perdido. Si obviamos situaciones muy dramáticas, todo lo que hacemos, aunque nos parezca una pérdida de timepo, nos acaba llevando a alguna parte. Os pongo un ejemplo.

Mi hija, la última semana de curso de 2 de bachillerato, y a falta de tres exámenes finales, empezó a encontrarse mal de la garganta. Os explico que aquí en Asturias la Ebau (selectividad de toda la vida) se hace en junio, y la recuperación en julio. No hay exámenes de septiembre, los exámenes finale son en mayo y si suspendes algo del curso lo recuperas en junio para examinarte en julio de la selectividad.

Pues agobiados fuimos a urgencias y nos dicen que son paperas, que hay un brote y en unos días estará bien. 

A mí me pareció raro pero bueno, fuimos a casaaesperar. Y un par de días después se puso peor. Fuimos al médico de cabecera y nos dicen que es infección de garganta y le dan antibiótico y alguna medicación más. Y al día siguiente se levanta con la garganta tan hinchada y deformada que no puede respirar. En el centro de salud un médico nos deriva a urgencias y allí dicen que es mononucleosis, y que con la mezcla de medicamentos que le dieron se le ha complicado y tiene que quedar ingresada.

Estuvo algo más de una semana y muy mal. Y yo allí con ella. Y luego a reposo un mes. Conclusión: no pudo presentarse a los exámenes finales ni a la recuperación y tuvo que repetir curso. Allí se lo explicó la psicóloga porque claro, menudo disgusto. Mi hija decía que había perdido un año estudiando, que si lo llega a saber habría salido sin parar...

Y el disgusto le duró todo el verano. Al final no repitió con todas las asignaturas, solo cursó aquellas de las que no se había examinado, aunque fue de oyente al resto para sacar buena nota en la selectividad. Pues ese año conoció a unas chicas que siguen siendo sus mejores amigas, con una incluso se fue de Erasmus. Coincidió con su hermano y empezaron a salir en grupo. Y descubrió una de sus vocaciones en unos talleres, y fue tan en serió que estudió una carrera de cuatro años relacionada. Además, afianzó conocimientos que el año anterior había estudiado un poco por alto porque segundo va muy deprisa. No fue un año perdido porque además de todo lo dicho viajó a Roma, cosa que en el siguiente curso no ocurrió, y aunque ya había estado con nosotros no es lo mismo, a esas edades esos viajes son lo más.

Y con las extraescolares me pasaba igual. Yo siempre los dejé elegir, y en la adolescencia fueron a béisbol. Mucha gente me decía que era una pérdida de tiempo porque no hay liga oficial, no están federados y hay pocos partidos. Pero yo no quería que mis hijos fueran Babe Ruth, quería que fueran felices. En plena adolescencia, cuando los hijos se vuelven búhos y apenas ven la luz del sol, los míos entrenaban tres días a la semana, durante dos horas, al aire libre. Hicieron un grupo de amigos que conservan. Mientras muchos chicos de su clase estaban de botellón ellos estaban entrenando, o cenando pizzas y tortillas en el campo, con algunos padres y el entrenador, por la zona. A veces hacían excursiones, incluso se fueron una semana a Barcelona. Y además, al hacer ejercicio mi hijo comía algo mejor. Yo no creo que eso sea perder el tiempo. A día de hoy no viven de ese deporte, pero tampoco creo que fueran a convertirse en Cristiano Ronaldo, así que mejor evitarles esa presión.

No hay tiempo perdido. Bueno, quizás sí. El que pasamos haciendo mal a los demás, o envidiando. Pero siomitimosla envidia y hacer daño el tiempo no se pierde, se vive. A veces estamos en un trabajo que no nos gusta, pero quizás, gracias a ese empleo llegamos a ese otro que nos encanta. O vivimos en una casa que no es lo que queríamos, y quizás, como no estamos felices nos decidimos a buscar y damos con la casa de nuestros sueños. Si hubiésemos vivido en una en la que soportábamos estar quizás no nos habríamos lanzado a buscar.

A veces empezamos unos estudios que no nos gustan y los dejamos. O incluso mantenemos una relación y al final no es lo que habíamos pensado. Pero no es tiempo perdido. Seguro que hemos aprendido algo o conocido a alguien. Seguro que descubrimos un libro, una película o un lugar al que nos encanta ir. Seguro que nos ayuda a saber lo que no nos gusta, o a afrontar los problemas que la vida acaba trayendo. Nada ha sido un tiempo perdido. Seguro que algo nos ha traído. Seguro.

Y hasta aquí el post de hoy. Me he enrollado muchísimo, espero que no os resulte unaentrada aburrida.Mil gracias por leerme y nos vemos el sábado en el resumen semanal.

Muy feliz jueves.


 


36 comentarios:

  1. Yo antes solía ser muy "productiva" y pensaba que estaba bien estar siempre "haciendo cosas y rindiendo". Pero por salud mental, me he dado cuenta que "perder el tiempo" es también muy necesario. Equilibrio, al fin.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Pues lo has resumido de maravilla.
    Feliz día.

    ResponderEliminar
  3. A mi nunca me ha creado ningún mal rollo lo de perder el tiempo, ¡todo lo contrario!, creo que en líneas generales la gente se estresa mucho con cosas muy simples... que si pierdo el tiempo, que si tengo que hacer muchas cosas, ¡que si tengo que apuntarme a muchas cursillos, ¡me gusten o no me gusten! ja ja ja...en fin... ¡es algo que no va conmigo! y cuando pierdo el tiempo ¡lo hago muy a gusto!!!


    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Qué razón tienes. A veces hacemos cosas por hacer y nos estrenamos a lo tonto.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  4. Yo creo que si se pierde el tiempo siendo consciente de ello se está genial. El problema es perder el tiempo porque no puedes hacer nada.. (mi caso ahora mismo ajjaaj).

    buen día!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Bueno, ahora estás en un momento algo complicado y se hace largo, pero yo he dejado de agobiarme por esas cosas.
      Feliz día.

      Eliminar
  5. Menuda entrada te has marcado sobre la perdida o no de tiempo, mi punto de vista es que sobre ese particular soy muy relativista, como en otras muchas cosas, cada uno tiene su manera de perder o de ganar el tiempo que nunca se sabe cuando se hace una cosa o la otra.

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, a lo tonto me ha salido una entrada.
      Yo también soy relativista, pero antes me agobiaba si dejaba pasar el tiempo sin hacer nada y ahora no. Si un día, teniendo mis obligaciones principales hechas, me apetece ver una serie, leer o darme un baño, lo hago.
      Muy feliz martes.

      Eliminar
  6. Efectivamente, salvo excepciones, no hay tiempo perdido, pues toda experiencia, por mala que sea, nos enseña algo.
    Holgazanear no es malo a menos que no hagamos otra cosa. De vez en cuando viene bien tumbarse en el sofá a dormir un rato y a ver alguna serie y no salir de casa en todo el día. Mi mujer y yo a eso le llamamos hacer el perro, animal que se pasa casi todo el día encerrado en casa tumbado y durmiendo, je,je.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Hombre, estar todo el día holgazaneando no, pero hacer el perro no está mal.
      En mi caso la perita es de trabajo, de las que necesita correr, olfatear, jugar con más perros.... así que lo llamaría hacer el gato.
      Feliz día.

      Eliminar
  7. A veces "perder el tiempo" es ganarlo. Sólo hay que tener muy claro qué significa para ti esa expresión, y si viene de ti o de algún prejuicio o creencia externa.
    Besos!

    ResponderEliminar
  8. Pues yo creo que por salud mental perder el tiempo es muy necesario pese a lo que como indicas parece que está mal visto. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Totalmente de acuerdo. Yo ahora estoy en una etapa en la que me da igual lo que esté bien o mal visto.
      Feliz martes.

      Eliminar
  9. A veces es difícil sacar algún beneficio del tiempo perdido. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que el beneficio está en descansar, desconectar o simplemente no agobiarse más. No siempre busco beneficios.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  10. Es cierto que lo de "perder el tiempo", es relativo. Para algunas personas, pasar una tarde leyendo es perder el tiempo, por ejemplo. Es bueno cultivar el espíritu y, en ocasiones, ese no hacer nada, nos ayuda a cargar las pilas para los momentos de agobio.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Pasar una tarde leyendo es un lujo que me encanta.
      Feliz día.

      Eliminar
  11. No me ha aburrido en absoluto. Me ha resultado de lo más interesante. Creo que andaba yo por los diecisiete o dieciocho años cuando leí Confieso que he vivido de Pablo Neruda. Allí hacía toda una reivindicación de perder el tiempo que me pareció fabulosa. Y es que nunca se pierde el tiempo mientras se está disfrutando; disfrutando de la compañía, de la actividad, de lo que sea. es cierto que a veces no nos queda más remedio que hacer cosas que no nos gustan, pero las hacemos por algo, algo sacamos de ello. Hay trabajos que no gustan, pero permiten ganarse la vida. Ponerse de codos sobre los libros no suele gustar, pero se adquieren conocimientos y sabiduría o se obtiene un título o un trabajo.
    Lo de tu hija en 2º de Bachillerato fue terrible. Yo que cada año he asistido al agobio de los pobres chavales por sacar el curso primero y por hacer buen papel en la EBAu después, entiendo que tuvo que ser un trauma para todos en casa, pero nunca tiempo perdido.
    Nunca me preocupó que mi hijo se aburriera y es que, junto a perder el tiempo, reivindico el papel terapéutico del aburrimiento. A mi hijo le llevó a desarrollar la imaginación con los Playmobil y a leer. Si le hubiera puesto la tele o el ordenador para que no se aburriera nunca hubiera leído ni hubiera sido tan ingenioso.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Yo también leí Confieso que he vivido con esa edad.
      Lo de mi hija da rabia porque se había sacrificado mucho durante el curso, pero el día del ingreso estaba tan mal, casi desmayada, sin poder respirar que si me dicen que nunca más puede estudiar, en ese momento me habría dado igual. Además, ir de oyente a la mayoría de materias, sin la presión de los exámenes le permitió fijar conocimientos y el otro día me dijo que los años que estuvo de profe en un instituto ayudaba a los niños usando esos conocimientos más que la preparación posterior.
      Jajaja, mis hijos,al igual que yo, son los reyes del Playmobil. Y dela lectura, claro.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  12. A mí lo de tener tiempo para perderlo me parece un lujo que no todo el mundo puede permitirse, o que muchas personas no saben apreciar. A veces, como bien dices, esos tiempos supuestamente perdidos son muy importantes en el devenir de tu vida.
    Es cierto que cuando eres joven un año te parece una eternidad, como le ocurrió a tu hija. Esa lectura del tiempo ha cambiado radicalmente cuando ese año no supone ni un 2% de lo que llevas vivido.
    Buen fin de semana, que ya está al caer.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Yo no tengo demasiado tiempo, pero cuando lo tengo he dejado de agobiarme por querer hacer y hacer. Hacer el.vago no es tan malo, jajajaja
      A mi hija le dio rabia porque había estado un año muy sacrificada estudiando, y al ver que sus compañeros empezaban a la universidad y ella repetía por algo que no podía controlar pues... desmotivación total.
      Yo en cambio, la vi tan enferma, que se ahogaba y desmayaba, que eso me pareció un mal menor. Y como digo más arriba, como a las asignaturas aprobadas solo iba de oyente, los conocimientos quedaron más fijados.
      El finde ha volado, jajaj. Feliz martes.

      Eliminar
  13. Estoy viendo que perder el tiempo no esta nada mal, me estoy aficionando a ello. Un beso

    ResponderEliminar
  14. siento que tu hija pasara la mononucleosis. yo la pasé en mi segundo año de carrera, y doy fe de que es una enfermedad muy chunga. lo peor, el diagnóstico erróneo de paperas.
    y sí, al final las cosas ocurren por algo, y el tiempo aparentemente perdido no lo es en realidad. siempre lo dedicas a algo que no habrías hecho si las cosas hubieran ocurrido de otra manera...
    en cuanto al otro tipo de "pérdida de tiempo" que comentas, yo a veces me sentía mal si durante una tarde de estudio en la biblioteca no había hecho gran cosa. pero, visto con perspectiva, qué importa ahora? hay días en los que estamos dispersos, y no pasa nada.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      La enfermedad es chunga de por sí, pero mi hijo, que la pasó un año después no estuvo tan mal porque no dejé que le diesen antibiótico, antiinflamatorios, medicación para el dolor y corticoides. Con esa mezcla mi hija tuvo una reacción impresionante, se ahogaba...
      Ella estaba dolida por repetir el curso así. Si hubiese ido mal ya estaría mentalizada, pero a falta de tres exámenes que llevaba preparados, pues fue un shock. A día de hoy vemos que fue para bien.
      Yo también era de sentirme mal por perder tardes, ahora me parece un privilegio.
      Feliz día.

      Eliminar
  15. Yo soy de las que trata de no perder el tiempo en especial cuando escribo. Pero me distraigo con facilidad y a veces en esas distracciones se me ocurren buenas ideas. Te mando un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Claro que sí, de las distracciones han nacido cosas geniales.
      Feliz día.

      Eliminar
  16. Después de una vida trabajando es razonable perder un poco el tiempo, los días se nos hacen mas largos, sobre todo e los que solo dormimos cuatro o cinco horas. Es importante relacionarse con otras personas, también tener algún hobbie, ver alguna película que no pudimos ver en su día y si es posible salir a caminar por el campo.
    Abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Yo también duerme solo esas horas y hago todo lo que dices, y es sanador.
      Feliz martes.

      Eliminar
  17. Yo el tiempo creo que no lo pierdo, más bien lo invierto por ejemplo en leer cuando tengo un día de estrés. últimamente duermo una media de 5 o 6 horas. Al día siguiente aunque voy algo arrastrada, lo aprovecho. Hago más cosas o esa es mi sensación.

    Besos y buen finde.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Opino igual. Yo duermo también muy poco desde hace años y hago cosas, pero vamos, que si no las hago tampoco me fustigo.
      Feliz martes.

      Eliminar
  18. ¡Hola! Como siempre, me ha gustado leer tus reflexiones, este tema me interesa mucho porque yo siempre me he agobiado con lo de perder el tiempo, pero luego pienso y me doy cuenta de que no es que haya perdido el tiempo viviendo mi vida de una manera un poco desordenada y apostando por algo que al final no se dio (como estaba planeado), porque todo lo que ha pasado durante estos años tenía que ser así y me ha abierto las puertas a otras experiencias, como lo que le ocurrió a tu hija. Respeto a lo de perder el tiempo por no hacer algo "útil" me pasa a menudo, me siento fatal si no hago cosas productivas y no puedo estarme quieta, y si me paso una tarde en el sofá me siento como mal, pero luego pienso... con lo que curro si una tarde que tengo libre me la paso viendo la TV está bien, es lo que el cuerpo me pide. Aún así de normal siempre tengo que estar haciendo algo, ya sea en casa, con amigos o con familia, o sola Jaja
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Qué bien que te guste leer la reflexión.
      Es justo eso, está uno todo el día sin parar y para un día qu nos sentamos encima sentirnos mal...pues no.
      Yo también soy de estar haciendo algo pero cada vez tiendo más a relajarme
      Feliz día.

      Eliminar
  19. Yo he llegado a la conclusión de que vez en cuando perder el tiempo no esta mal, porque para la mente sobre todo y también físcamente lo necesitamos, si no nos damos un poco de relax, de cambiar de chip como digo yo no estamos bien y necesario parar y no agobiarse, yo tengo claro que según me voy haciendo mayor tengo menos remordimiento porque un día me siente en el sofá a ver una serie o una pelí o dos como suele ocurrir los sábados o domingos que hace mal tiempo y no vamos a ningún sitio, y disfruto de la compañia que ya es mucho, de modo que eso de perder el tiempo de vez en cuando es muy necesario, si no creo que llegaría un momento que me agobiaria y no quiero llegar a eso.
    Siento lo que le paso a tu hija, la pobre tuvo que pasarlo muy mal, madre mía pero bueno todo pasa.
    Un beso y como siempre nada de rollo, una vez más me ha parecido muy interesante tú jueves reflexivo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Claro que sí, una tarde de pelis es un regalo.
      Lo de mi hija fue un fastidio porque físicamente estuvo mal mucho tiempo y repetir curso así de golpe, cuando pensaba que iba a empezar a la universidad es una faena.
      Muy feliz martes.

      Eliminar