jueves, 10 de diciembre de 2020

Reflexión: la vida cambia

 Jueves reflexivo:avances

Hola a todos y bienvenidos un día más. ¿Qué tal va la semana? La mía es rara, ando muy muy liada y el puente me ha descolocado, jejejeje. 
Hoy es el día del post reflexivo e improvisado. Ya sabéis que estas entradas las escribo un poco sobre la marcha, sin tener nada planificado, y son reflexiones.
Es temprano, estoy con la mejor compañía gatuna y con un café bien bien caliente, así que sin más rollo, empezamos.
 
 El otro día, tras leer el blog de Chema(Mi mundo de papel), me dio por pensar en lo mucho que han cambiado algunas cosas.
Él hablaba de las guías de teléfonos, y recordaba esa época en la que nos localizaban  así. Y en ese momento recordé una anécdota que había olvidado, y que le conté a él. 
 
Siendo yo adolescente, un chico, para una emotiva festividad, decidió enviarme un ramo de flores. Al parecer(yo me fui enterando después) sabía mi apellido y mi calle, y con esos datos y gracias a la guía de teléfonos, me localizó, pero entonces ponían solo el piso, no la letra de la puerta. Así que eligió un piso al azar y quien recibió el espectacular(era un ramo increíble) ramo fue mi vecina octogenaria. La mujer era lista y sabía que el nombre de la tarjeta con la dedicatoria no era el suyo, así que ató cabos y me entregó el ramo muy ilusionada. Pero a la par que buena y lista, era algo chismosilla y todo el edificio supo que tenía un admirador.
En mi edificio había gente joven y con ellos la cosa no me daba gran vergüenza, nos pareció divertido, pero con la gente mayor...me felicitaban como si me hubiera casado, y yo quería que me tragara la tierra.
 
Hoy en día seguramente me habrían localizado por redes sociales, y en lugar de enviarme un ramo habría recibido una nota de voz o una foto llena de emoticonos, jejejeje. Y me habría hecho ilusión pero...no sería lo mismo.
 
Cuando yo era adolescente no teníamos redes sociales, ni whatsapp ni ningún tipo de mesajería. Cuando los amigos no estábamos juntos, no estábamos en constante comunicación, como ocurre ahora. Nosotros quedábamos siempre en una zona, y acudíamos casi de una manera tácita. Si un día no se podía ir, o avisábamos con tiempo o simplemente no íbamos. Y cuando conocíamos a alguien le dábamos el teléfono de casa, y nos llamaba y hablábamos delante de toda la familia, lo que nos convirtió en expertos en mantener conversaciones telefónicas en modo telegrama. Yo no conocí a nadie que tuviese teléfono en la habitación, como en las pelis americanas. 
 
Hoy en día la gente está en contacto permanete, no hay tiempo para la desconexión. Los adolescentes se ven en clase(hablo de época prepandemia, ahora las cosas están complicadas) y se ven fuera. Pero cuando no están juntos hablan por whatsapp y ven sus publicaciones en Instagram o facebook. En mi época(ay qué antiguo ha sonado eso) nadie veía las fotos de mis viajes, como mucho, las amigas que venían a casa porque querían verlas, o iba yo a sus casas a ver las suyas. Pero nadie más. Yo posaba para tener un recuerdo, no pensaba que nadie, excepto mi familia y el fotógrafo que revelase el carrete, iba a ver esa foto. Ah, y durante las vacaciones no tenía ningún contacto con mis amigos, les mandaba una postal y nada más.
 
Tuve una adolescencia muy feliz y no me imagino como habría sido en estos tiempos. Soy un desastre con redes sociales, hace mil años que no comparto nada, y no sé si en esa época habría sido así. A lo mejor me habría quedado descolgada del grupo, o habría tenido que claudicar y estar activa en redes. Quien sabe. Supongo que vivimos acorde a nuestra época y somos felices así. Pero a mí me gustaba llegar a casa y estar con mi familia, ver mi serie favorita, estudiar y dejar mi vida de fuera pues eso, fuera. Y también me encantaba estar con mis amigos, sin pensar en las cosas de casa, dejarme llevar, sin más preocupaciones. Hoy en día, en las quedadas,  tendría que estar pendiente del whatsapp, porque claro, los padres estamos en contacto con los chavales, cuando están fuera, de esta manera. 
 
Me encanta el progreso, me gusta avanzar y no podemos estar siempre pensando que lo pasado fue mejor, pero de vez en cuando, tengo reminiscencias del pasado y añoro un poco, solo un poco, esa época. Ahora es todo más cómodo pero a mí me gustaba esa etapa en la que no todo era tan fácil. Si íbamos a llegar tarde había que buscar una cabina y avisar, para evitar infartos en los padres. Mis hijos avisan siempre por whatsapp porque, según ellos, si tardan un poco soy capaz de enviar a los Geos. Os aseguro que exageran, no soy tan dramas.
 
 
cabina-telefono
De estas casi no quedan, y nadie las usa, esta foto tiene seis años(la he sacado de un I´m currently loving de 2014)

 
Una cosa que me encantaba era quedar con la pandilla para ir al cine y decidir a qué cine se iba. Ahora no hay duda, todos están en el centro comercial. Nosotros quedábamos en un punto, a veces íbamos ya con la idea de la peli y nos íbamos de allí al cine, y otras lo decidíamos sobre la marcha; nos íbamos a una calle en la que estaban las carteleras en una pared, y escogíamos. Y luego íbamos a un cine o a otro, el que proyectase la peli elegida, y según el cine al que hubiésemos ido merendábamos en una hamburguesería, en una cafetería que hacía las mejores tortitas, o  en un bar que daba unos bocatas muy ricos. Hoy se merienda en el centro comercial.

Pero hay cosas que no han cambiado. Sigo viendo pandillas en la playa,y en el fondo son como éramos nosotros. Las toallas son parecidas, los bikinis también y en sus mochilas hay bocatas, agua o refrescos y crema solar. Pero yo llevaba un walkman, y cuando las pilas empezaban a estar gastadas, rebobinaba con un bolígrafo. Y solo hacíamos fotos algunas veces, cuando alguien llevaba cámara. Ahora llevan la música en el teléfono y hacen fotos constantemente gracias al móvil, a mí eso me habría encantado.

No quiero hacer un post nostálgico porque no lo estoy. Me asustan las navidades, pero no estoy nostálgica. Pero a veces es inevitable recordar esas épocas que fueron buenas por estar muy exentos de preocupaciones(aunque en su momento todo nos pareciese terrible), en las que en los cumpleaños regalábamos cintas de cassete, diarios, papel de cartas o carpetas. Años en los que nuestras colonias eran Don Algodón, Farala o Eau Jeune, entre muchas otras. Años en los que nos escribíamos cartas en papeles perfumados, y que nos pasábamso mucho tiempo en el videoclub eligiendo las películas. Años en los que grabábamos en una cinta nuestras canciones favoritas y años en los que todo era fácil. En mi generación, la mayoría tuvimos padres que salían de una dictadura y quisieron darnos libertad. Por eso pude, además de viajar bastante con mi familia, hacer viajes con el instituto, escapadas con amigas, noches de chicas en casas de amigas, findes en pandilla...y pude salir por la noche, ir a conciertos, cerrar los bares, estar fuera hasta que amanecía, en definitiva, pude vivir. Y ahora mis gustos son otros en parte por eso, porque pude vivir, y en parte, también,  porque así es la vida, evolucionamos. 
 
Pero creo que en el fondo, una buena parte de la gente joven es igual que era yo. Si los despojamos, aunque sea mentalmente, de toda esa tecnología, en el fondo son gente joven que solo quiere disfrutar, que tienen amigos, ganas de pasarlo bien y que están descubriendo la vida. 
 
Me estoy diluyendo así que iré terminando. No sé realmente qué conclusión puedo sacar de la reflexión, solo que antes teníamos muchas cosas buenas, que hacían la vida interesante, pero que todo cambia y la evolución ha traído muchas cosas buenas. Si, si, y también malas, pero quedémonos con las buenas. 
Y una de las buenas es el mundo de los blogs. Es estupendo poder comunicar, y en mi caso manteniendo el anonimato(no del todo, pero bastante),y compartir. Cada día aprendo algo, descubro cosas que no sabía o recuerdo cosas quetenía olvidadas. Y eso es un regalo.
 
Y ahora ya me despido que esto me ha quedado muy largo y no sé si alguien será capaz de leerlo entero.
Mil gracias por vuestra visita y nos vemos el sábado con el repaso semanal y con algún especial.
Muy feliz jueves. 

51 comentarios:

  1. Lo que son las cosas.. yo recuerdo que mira que no teníamos móviles, pero al final nos enterábamos del tlfn y dirección del chico que nos gustaba.. imagino que la mente la teníamos más despierta. Buen día!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, estábamos a todas y no se nos escapaba nada.
      Feliz día.

      Eliminar
  2. Hablando con mis hijos, ellos creen q era un drama el no tener en nuestra época internet, RRSS, móvil, tablet...yo creo que era una maravilla... no hay constancia gráfica de las locuras que pudimos hacer, de los peinados y modelitos que llevábamos ;-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, por desgracia mi madre me hacía muchas fotos, películas de super8 y vídeo, así que constancia de mis looks hay. Pero las locuras...eso queda en secreto. Y opino igual, era una maravilla vivir sin RRSS, no estábamos 24 horas cnectados con los demás, teníamos momentos de esparcimiento.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  3. Bien... Gema pues aunque soy mayor que tu me identifico con todo lo que has contado porque así fue mi juventud también, hablar pr telefono sin intimidad, ja ja ja, en clave, buscar a cabina como locas para avisar que llegaríamos mas tarde y absolutamente la forma de vivir la vida que mencionas para mi fue tal cual... identica, pero... ¡a contrario que a ti me encantan las redes sociales, las tengo todas y publico diariamente pero lo veo desde otra perspectiva, para mi es algo divertido, no es una forma de vida y por supuesto soy muy consciente que todo lo que publico no me importa que los demas lo vean, lo que considero realmente privado desde luego que no lo publico, para mi no es una forma de vida, es otra cosa, algo que ha venido despues y que a mi me ha hecho mucha gracia, ¡¡¡muy simple!!!! y totalmente cierto que la vida cambia y hay que ir adaptándose en la manera de lo posibe y no quedarse anclado en el pasado pensando que cuaquier tiempo pasado fue mejor, no soy nostalgica pero.... ¡me encanta la juventud que me tocó!, pero igualmente me hubiera gustado ahora (sin pandemia), yo soy muy adaptabe ¡afortunadamente para mí!


    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Coincidimos mucho, y me encanta.
      A mí me gustan las redes sociales, pero soy un desastre, jejeje. Pero en tu caso, incluso en el mío, las redes sociales, como dices no son forma de vida, pero en la gente muy buena a veces trae problemas porque no distinguen y a veces publican cosas que dan pie a bullying(nada debería dar pie a eso) o que ellos no saben gestionar.
      Muy feliz día y a mí también me gusta mi juventud.
      Feliz día.

      Eliminar
  4. Yo no tuve una adolescencia especial pero sí recuerdo todas esas cosas. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Bueno, la mía especial tampoco fue, creo que fue normal.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  5. Mi adolescencia fue buena, me has traído bonitos recuerdos.
    Aviso: de vez en cuando tengo problemmas para entrar.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra mucho haberte traído esos recuerdos.
      Feliz día y no sé qué decirte de los problemas, lo miraré.

      Eliminar
  6. Evidentemente no todo tiempo pasado fue mejor, más bien diría lo contrario; lo que ocurre es que la nostalgia nos hace recordar las cosas de otro modo. Aun así, hay cosas que considero que no deberían haberse perdido y que un mal entendido progreso ha dado al traste con ellas. Llegará un día en que los cines desaparecerán a favor de las plataformas digitales, los discos (tanto de vinilo como en CD) también y solo se escuchará música bajada de internet, y los libros de papel pasarán a la historia. Ojalá me equivoque o, por lo menos, que no lo vea, je,je.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Si, la nostalgia suele mejorar los recuerdos, jejejej. En mi caso tuve una buena adolescencia por lo que digo; tuve libertad, no tenía grandes problemas y mis amigos me querían y entendían, así que los recuerdos, pues son buenos.
      Ufffff, me estoy gastando lo que no tengo en mi biblioteca, si desaparecenlos libros en papel no sé que haría. Y también tengo colección de vinilos, cd y casette.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  7. Leyéndote pensaba, "pues anda que no ha cambiado ahora con la pandemia". El otro dia leía un artículo acerca de que no somos conscientes de que la normalidad...nunca volverá. Porque la historia se va escribiendo y esto nos va a cambiar, algunas cosas de esta pandemia, van a quedarse.
    Un besazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Uffff, da mucho miedo pensarlo, pero no queda otra que adaptarse.
      Feliz día.

      Eliminar
  8. Pues yo lo he leído entero y además superenganchada. Yo viví esa época que dices y además más tiempo y más consciente que tú por los años que se llevo.
    Lo malo no era cuando quedaba toda la pandilla en un sitio y el que podía iba y el que no, no. Lo malo era cuando habías quedado con alguien en una esquina y te surgía algo terrible que te impedía ir (un castigo de los padres por ejemplo) y no podías avisar porque la otra persona ya había salido de casa y no había móviles. O tenías que mandarle a alguien un documento y había que solicitar el documento, fotocopiarlo, cosa que durante un tiempo fue imposible y luego, una aventura (recuerdo que en algunos sitios había máquinas de fotocopiar que funcionaban con una moneda, y finalmente enviarlo por correo postal.
    Con todo lo bueno y lo malo, y el buen o mal uso que se hace de la tecnología, yo a esto que tenemos ahora solo le veo ventajas.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Ay qué bien que te hayas enganchado.
      Ay es verdad, cuando no podíamos acudir y llamábamos a la otra persona y la madre decía que ya había salido era una tragedia.
      Ay las fotocopias y los documentos, qué odisea.Me has hecho pensaren mi madre. Ella participaba en concursos de relatos y escribía a máquina, con papel de calco y si se equivocaba era un drama. Y luego todo iba por correopostal.
      Cierto ahora hay muchas ventajas.
      Feliz día.

      Eliminar
  9. ¡Hola!
    Leer tu post ha sido cómo viajar al pasado. Los grupos de whatsapp lo inventamos nosotros sin quererlo, pues los corralillos de amigos y las mujeres que se ponían a cascar en la calle con sus sillas, erámos el intercambio de conversaciones y chismes, jajaja. La verdad es que con esto de la tecnología y las redes sociales, encuentras a gente en un periquete, aunque no es lo mismo que buscarte en la guía telefónica.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Ylos de Sálvame(no lo veo, que conste)se creen que han inventado algo, jejeje.
      Feliz día.

      Eliminar
    2. Uf, esos petardos!🙈
      P.d. se me ha olvidado decirte que yo también recibí un ramo de rosas rojas, pero el autor no dejó firma en la nota. Así que nunca supe quien fue mi admirador secreto 😔
      Feliz día.

      Eliminar
    3. Opinamos igual del programita, jejeje.
      El mío era anónimo, pero reconocí la letr ade la tarjeta porque tenía una felicitación de Navidad, y además, algo después, me lo dijo.
      Ay qué intriga, ¿cómo puedes vivir sin saber?
      Mi madre tuvo una floristería y muchas veces iban chicas a preguntar quién les había enviado algún ramo, pero hay secreto profesional, jejeje.
      Feliz día.

      Eliminar
  10. ¡Hola, Gema!
    Comparto contigo esa misma nostalgia y el pensamiento positivo de que hay que quedarse siempre con los buenos recuerdos, como esas llamadas desde casa o desde una cabina telefónica para quedar en tal sitio para luego ir al cine o para contarnos telegráficamente "aquellas pequeñas cosas que nos dejó un tiempo de rosas", como dice la letra de la canción de Serrat, porque en nuestra época no teníamos móvil ni falta que nos hacía para ser felices, espontáneos y amigos de nuestros amigos.
    Además otra cosa muy importante era esa sensación de eternidad del tiempo y no como ahora que prácticamente no tenemos tiempo para nada.
    En fin, confiemos que vengan cambios y se lleven toda esta compleja situación actual para que la humanidad pueda despertar de esta pesadilla.
    Te deseo un feliz jueves y buen fin de semana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      La sensación de eternidad en el tiempo la echo mucho de menos, ahora se esfuma.
      Ojalá vengan cambios buenos.
      Muy feliz día y mil gracias por comentar.

      Eliminar
  11. A mi una vez me mandaron un ramo con nueve rosas rojas y nunca supe quién fue.Me dió vergúenza preguntar en la floristeria.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ay qué intriga, ¿y te quedaste así?
      En mi caso de mano era anónimo, pero yo tenía una felicitación de Navidad y comnparé la letra...y luego, además, me lo dijo.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  12. Las cosas han cambiado mucho desde que éramos jóvenes a hoy. Parece que hayan pasado mil años con todo lo que hemos avanzado de golpe. El progreso ha traído muchas cosas buenas , pero también otras que no lo son tanto. Hoy en día con las redes sociales se facilita mucho la comunicación pero sigue habiendo mucha soledad en el mundo.
    Un besito

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Siiii, parece que han pasado mil años pero en el fondo no hace tanto.
      Es muy triste que siga habiendo soledad.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  13. M identifico con todo lo que nos cuentas Gemma. A mi el mundillo blogger también me ha ido bien, actualmente es toda una compañia. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      El mundo blogger, en momentos complicados es una salvación.
      Feliz día.

      Eliminar
  14. A los que tenemos bastantes años nos has hecho recordar, en mi caso no tuvimos teléfono fijo hasta los veintitantos. A finales de los años 50. aun había muchas carencias. Los jóvenes nos divertíamos casi todos de la misma forma, era lo que había, el cine y los bocatas y solo cuando teníamos dinero.
    Hoy los peques desde muy corta edad utilizan las actuales tecnologías, estoy seguro que muchos no se imaginan como era la vida sin Televisión, radio o teléfono fijo, ni siquiera agua corriente en las casas.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      A mis padres les pasaba eso. Tuvieron teléfono a los 18 o 20, más o menos. Para divertirse iban al cine o a los bailes)aquí había muchos bailes que luego se convirtieron en discotecas)y no tuvieron agua corriente hasta los 12 años.
      Antes la vida era muy dra, pero al menos enmientorno, la gente sabía buscar la felicidad y no eran personas tristes.
      Muy de acuerdo, un niño no se imagina la vida sin tele.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  15. Hola guapa!!. Cada vez estoy mas enganchada a tus posts.

    ResponderEliminar
  16. me alegra que mi entrada de las guías telefónicas te haya inspirado. ;) la anécdota del ramo es muy simpática, aunque te sintieras abrumada por las felicitaciones ante lo que veían casi como un matrimonio inminente. :D
    yo estuve usando cintas para grabar las canciones de la radio hasta muy tarde, hasta 2003 o una cosa así.
    respecto al teléfono en el salón, si te llamaba un amigo se enteraban de todo lo que hablabas. pero peor aún era cuando llamaba algún familiar, te ponías tú porque estabas más cerca, y te criticaban porque no habías estado lo bastante locuaz con la tía-abuela de turno... joder, a un adolescente qué le vas a pedir?
    yo empecé la carrera en el curso 1995-96, y acabé en el 2003-04, las ingenierías es lo que tienen. el caso es que al principio de ese período aún nos llamábamos a las casas, y al final ya se usaba internet y los móviles de manera generalizada. hubo muchos cambios en ese período...
    besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Siiiii, tu entrada fue muy inspiradora.
      Jajaja, me sentía abrumada porque además, al principio, no sabíamos quien lo había enviado y todo el mundo especulaba, jejejeje.
      Yo también usé cintas hasta tarde, porque en mi coche no tuve reproductor de cd hasta 2003, así que cogíamos las canciones que más nos gustaban de los cd y las poníamos en cintas para el coche.
      Jajaja, yo no solía ponerme al teléfono cuando sonaba, pero cuando lo hacía era habladora, yo era la que sabía los cotilleos de la familia, jejejeje. Mi hermana era más como tú, así que ella nunca contestaba.

      Claro, hay etapas en las que la vida cambia, si has estado en un mismo centro tantos años todo cambia mucho desde que empiezas hasta el final, y más teniendo en cuenta de que cambias de década y hasta de siglo. Yo esos cambios los noté mucho entre el 2000 y 2003, pero en esa época yo ya no estaba estudiando, los noté de otras maneras, en cambio en los 90 todo fluía, estaba en otra etapa y no noté los cambios, que los hubo, claro.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  17. Creo que antes nos tocaba pelear más las cosas que ahora, que se lo encuentran todo más fácil. Empezando por los estudios. Con eso no quiero decir que hayamos ido a peor. En general la evolución ha sido para bien, aunque se echen en falta cosas de antaño.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      La verdad es que antes era todo difícil. En los estudios hay de todo. Conozco casos de gente que no sabe nada y ha ido pasando cursos y tienen estudios, cosa que sorprende porsu falta de cultura y de todo. Y otros casos han tenido qu elucharlo más.Mis hijos, por ejemplo, no lo han tenido fácil. Les exigían mucho, no sé si era cosa del centro o de los profes y ni siquiera sé si en todos los centros exigían lo mismo. Ellos se esforzaron y han ido sacando sus estudios(y siguen, porque aunque han acabado siguen formándose, todo les parece poco, jejeje).
      Ahora hay cosas más fáciles y otras no tanto.
      Mis hijos trabajan en academias, dando clases a chicos de bachillerato.
      Pues tienen muchos problemas con los del último curso de bachiller. Esos chicos dejaron de ir a clase en marzo, las clases on line fueron bastante desastrosas, y ahora les toca continuar como si hubiesen tenido clase normal. Muchos quieren hacer selectividad, y necesitan una nota concreta para acceder a la carrera que quieren. Y claro,no tienen base porque el año pasado no acudieron a clase en los meses más importantes...y lo están pasando fatal porque se les exigen cosas que no han aprendido y en matemáticas, por ejemplo, sin esa base no puedes avanzar.
      Esos chicos se esfuerzan mucho y el resultado es desastroso y algunos no podrán acceder a lo que quieren, hay uno que lleva toda la vida preparándose para tener la nota exigida en medicina y sabe que con esto lo tiene imposible, le faltan muchas matemáticas(a pesar del verano de estudios que se ha pegado)y va a perder su oportunidad, con lo que ha luchado.
      En cambio hay otros(algunos entre los alumnos de mis hijos) que con estar en redes sociales y botellón ya se conforman, y claro, a esos no se les exige nada.
      La evolución siempre es buena, pero hay cosas de antes que no deberían haber desaparecido. Y algunas, con esto que nos ha pasado, parece qu evuelven. EN mi ciudad, como la hostelería ha cerrado la gente hace picnis(que toda mi familia lleva haciendo años) y hacen más cosas al aire libre.
      Muy feliz día y menudo rollo te he soltado.

      Eliminar
  18. Qué recuerdos, mis hijos cuando les contaba cosas de estas me miraban como diciendo que pena de infancia tuvo mamá, jajaja. Un beso

    ResponderEliminar
  19. Mi estimada Gemma todo ha cambiado, yo que me identifico plenamente contigo, qué puedo añadir que no has contado ya. La vida es extrasocial, incluso reunidos en carne y hueso siguen siendo virtuales. No se, a mi que esto me da un poco yuyu para los jóvenes, es todo (al menos así lo creo) demasiado superfluo si sol estás ligado a las redes sociales de esta forma operativa que hay hoy en día y que muchos de los mayores estamos en ello, pero nuestra mentalidad puede elegir, los jovenes de ahora, no es lo que viven y con el virus por medio se ha hecho mucho más evidente esa artificialidad. Jo, que optimista me veo, vaya, pero no se no lo veo claro para esta generaciones de jóvenes españoles, al menos. Un beeeeeosoooooo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      A mí también me da un poco de yuyu para los jóvenes precisamente por lo que dices.
      Jajajaja, es que a veces cuesta ser optimista. Esta pandemia ha castigado a muchos sectores. Hay grupos de alumnos qu ehan perdido un cursoy no tienen base, y ahora lo están pasando fatal. Y los niños pequeños, cunado crezcan, no van a recordar un mundo sin mascarillas.
      Feliz día.

      Eliminar
  20. Un viaje por el pasado cercano y el presente lleno de optimismo y buen rollo. Creo que todos estamos de acuerdo con lo leído. Sí, ya sé que esto no es un cumplido sino más bien lo contrario pero es que todos no somos tan corteses, no obstante gracias por recordarnos lo que hemos vivido.

    Fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  21. Yo creo que te habrías adaptado, de haber tocado ser adolescente ahora. Creo que habrías sido feliz, aparte de este pésimo año, con las redes sociales. Como decís, hay quienes quieren tener amigos y pasarla bien.
    Interesante reflexión.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Eso me gusta pensar, jejeje, que me habría adaptado.
      Feliz día.

      Eliminar
  22. En mi epoca tampoco habia ni wasap, ni redes sociales ni los niños tenian teléfonos moviles, jeejeje

    ResponderEliminar
  23. Me has hecho recordar una época que yo también he vivido y leyéndote, que yo también he llegado al final, jeje, he recordado muchos momentos de mi vida, era todo tan distinto, pero lo pasábamos muy bien.
    Y mi marido dice que es un rollo esto de estar enganchados al whatssap y al teléfono pero y o le digo que si pasa algo,a mi madre o a mi hijo o al él mismo no es tan difícil de localizarte, porque yo recuerdo cuando falleció mi abuela paterna lo que costo localizar a mi tía, hasta tuvimos que recurrir a la policía municipal porque no había manera de encontrarla, que distinto hubiera sido teniendo un teléfono móvil con whatssap.
    Como siempre me ha gustado mucho tu jueves reflexivo, aunque como siempre llego tarde, pero bueno como decía mi padre, lo importante es llegar.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Tu marido tiene razón. Yosolo estoy pendiente del whatsapp cuando mi marido o mis hijos están fuera. El resto del tiempo desconecto, si es urgente me llaman.
      Antes era muy complicado localizar a alguien si estaba fuera de casa.
      Muy feliz día y claro qu esí, lo importante es llegar.

      Eliminar
  24. Me encanto tu post. Me acuerdo de las guias telefonicas , yo buscaba los actores y nunca los encontraba , claro era muy chica y no sabia que usaban seudonimos... jaja! Tambien las usabamos cuando nos juntabamos entre amigas , elegiamos un numero al azar y haciamos bromas. Hasta que nuestras madres se quejaban que gastabamos telefonos! Me acuerdo tambien de los papeles de carta perfumados!
    Lo de las redes es muy bueno y malo a la vez. Yo vivo renegando que mi marido hace muchos amigos por internet. Me ha pasado de ir a vacacionar y decirme, aqui vive fulano que conozco de facebook vamos a verlo personalmente. Hasta nos fuimos de viaje con amigos virtuales y nos conocimos en las Cataratas del Iguazu! No voy a mentir, soy muy miedosa con eso, pero fue linda experiencia, gente muy piola, muy sana.
    Eso es lo que yo a mis alumnos de sociologia les enseñaba que eran " los no lugares" por que las redes no son lugares, per estan llenos de gente.
    Si me das a elegir yo soy mas de barrio. Charleta pero en persona. Y una de mis mejores amigas me la hice esperando ambas el tren! No hay red que me lo reemplace. Besos y buen finde

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Muchas gracias, qué bien que te guste el post.
      Jajaja, qué traviesas con las bromas.
      Yo también soy muy miedosa en eso de desvirtualizar, pero me iría a las Cataratas de Iguazu sin pensar, jejeje.
      Hace tres años desvirtualizé a una lectora del blog y fue una experiencia muy muy buena.
      Feliz día y también soy de charleta en persona.

      Eliminar
  25. Hola! Me ha encantado leer tu reflexión, me ha hecho viajar también a mi adolescencia :) Recuerdo cuando mis amigos y yo íbamos al videoclub, o con mi primer novio que hasta nos hicimos socios Jaja, pillábamos algunas películas y listo, ahora podemos pasarnos una hora porque no sabemos qué peli de las muchas que hay en Netflix seleccionar. También recuerdo que tenía que localizar a mis amigxs usando el fijo y me daba vergüenza por si respondían sus padres, y que mi madre tenía que dejarme sola en casa a los 13 años porque trabajaba hasta la 1 o las 2 de la madrugada y mi casa está en el campo, encima no teníamos ni fijo así que ni vecinos ni teléfonos ni nada... Y las cabinas telefónicas! Me acuerdo que iba siempre a la que está al lado de la panadería del pueblo. Como te decía, tus post también me hacen reflexionar a mi Jaja Y me encanta leer tus anécdotas, la del ramo de flores qué graciosa!
    Un abrazo

    ResponderEliminar