lunes, 24 de noviembre de 2014

Mi experiencia con Reyes Magos y Ratoncito Pérez, como expliqué la verdad.

  • Cómo explicar a los niños quienes son los Reyes Magos y El Ratoncito Pérez.



Hay cosas de la infancia que no cambiaría por nada.



Holaaaaa!!!!!¿Qué tal habéis pasado el fin de semana? Espero que haya sido muy muy bueno, lleno de cosas especiales. Aquí el domingo llegó envuelto en lluvia pero también es bonito pasear entre paraguas, y ver que la piedra de las iglesias del centro brillan bajo la lluvia, y si entras en algún sitio pequeño y acogedor a tomar un café huele y sabe mejor que nunca.

Antes de empezar con el tema de hoy quería agradecer una vez más vuestros comentarios, y también los que me enviáis a través del formulario que hay arriba a la derecha, leer que alguien te da las gracias, así, simplemente porque le gusta lo que compartes pinta de color el fin de semana, así que muchas gracias a quien me escribe esos agradecimientos, no tengo palabras suficientes para decir lo que siento al leer algo así.
Bueno, para no hacer el post interminable empiezo ya,que luego siempre me alargo más de la cuenta, jeje.



Hoy quería compartir mi experiencia con el tema de los Reyes Magos y el Ratoncito Pérez,o de cualquiera de los seres mágicos de la infancia, y ya antes de empezar os digo que es simplemente eso, mi experiencia.

Lo primero que quiero aclarar es que cada uno educa a sus hijos como mejor le parece, nadie es mejor ni peor por tener unas ideas, pero siempre hay que respetar. Y digo esto porque cuando mis hijos eran pequeños, algunos padres opinaban que la historia de los Reyes y demás personajes solo servía para dar falsas esperanzas a los niños para luego traumatizarlos con la verdad. Yo entiendo que es una forma de pensar, pero entonces lo ideal sería que, ya de paso, le explicasen a sus hijos que los otros niños tienen mucha ilusión con esas creencias y no se les deben estropear contándoles la verdad, y entonces sí que sería una verdadera convivencia.
Ya expliqué lo que me pasó a mí con el ratoncito Pérez cuando mi hijo tenía unos 6 años, lo cuento aquí.

                                              
  •     
  •    La verdad es que a mí me parecía fatal que alguien se creyera con derecho a decir a los hijos de los demás lo que es verdad o mentira, y yo tuve que desmentirlo y pasar unos apuros...
  •   Yo quería que mis hijos creyeran en los Reyes y demás, me pareció lo mejor y como tienen muchos primos de su edad y todos creían, pues no me resultó demasiado difícil.
  •    En la familia lo primero que hicimos, al ser muchos, fue llegar a un acuerdo y los regalos se daban solo a los niños y a mi suegro, pues era su cumple, a los adultos no porque literalmente nos arruinaríamos aunque al final a los abuelos siempre les caía algo a todos, pero los tíos no. A los niños les explicamos que en la carta solo se pedía para niños porque sino no nos cabrían las cosas en casa, y la verdad es que coló.
  •    Y volviendo a mi experiencia mi planteamiento fue el siguiente, aguantarlos con estas creencias todo el tiempo posible dentro de una lógica, no creo que sea normal creer en los Reyes con 14 años, pero mientras fuesen peques quería disfrutar esa etapa intensamente y cuando yo considerase que ya había llegado la hora de contárselo buscar el momento y la manera de hacerlo sin dramas ni traumas, y diciéndoles que no tenían que decírselo a los otros niños, especialmente a los pequeños.
  •     Los años en los que creían en los Reyes los disfruté mucho, cada año escribíamos la carta tras muchas negociaciones porque el pequeño siempre lo pedía todo, agotaba unas pegatinas que venían en el catálogo para marcar lo elegido y cuando las acababa pegaba pegatinas de sus cuentos o possits, nos reíamos mucho. Y lo único que era "obligatorio" era pedir un libro, por supuesto adecuado a la edad.

  •   En Gijón, como en muchos sitios, los Reyes envían pajes a buscar las cartas así que allá íbamos nosotros, a esperar horas y horas de cola para entregar en mano una carta y recibir un caramelo, que para ellos era un superregalo por proceder de tan insignes personajes. Los nervios que pasaban y la emoción de sus caras es algo que no tiene precio.
  •    Además, por entonces, en Gijón, si enviabas la carta por correo desde la oficina de Correos te mandaban a casa una carta con un detallito, cosas como esos laberintos que tienen una bolita o un pompero, con el sello de correos. El detalle en sí era una minucia pero el recibir una carta firmada por los Reyes era algo lleno de magia para ellos, así que yo escribía otra carta con ellos y la echábamos en el buzón, para "asegurarnos por si el paje la perdía" y cuando alrededor de año nuevo nos llegaba la respuesta ya sabíamos que Sus Majestades habían recibido la carta.


    Nosotros usábamos cartas compradas para enviar por correo pero al paje le dábamos una hecha por nosotros con brillantina y dibujitos.
  •    Luego, estaba la magia de la Cabalgata,o ir a recibir a los Reyes al Puerto Deportivo, algo tradicional aquí en Gijón. ¡Qué nervios pasábamos! Había que preparar el confeti, ir temprano para pillar un buen sitio, entretenerlos en la espera y por fin llenarnos de ilusión y volvernos todos niños por unos instantes.
  •    Y esa noche era taaaannnn especial, nervios preparando el agua de los camellos,leche y galletas para los Reyes, aunque cada año esto cambiaba, algún año era coñac, otro café, ellos decidían, y por supuesto, el zapato debajo del árbol.
  •   Y nosotros esperando a que se durmieran, que siempre era tardísimo porque tenían sed, más sed, había que ir al baño, les entraba hambre, jejeje, lo que inventa uno para ver a los Reyes(como Espinete que siempre lo intentaba pero al final se dormía).
  •   Y cuando por fin se dormían quedaba lo mejor para nosotros; la ilusión de preparar los regalos, comer y beber los manjares reales que nos dejaban, algunas veces incluso dejé 3 rastros de brillantina desde la ventana hasta el árbol, era purpurina de tres colores y la idea me la dio una amiga, quedaba genial pero tuve purpurina en casa indefinidamente, jeje.
  •    Y a la mañana siguiente...ayyyy, los nervios para levantarse, yo cámara en mano para grabar sus caras, la emoción y el brillo en los ojos y esas ganas de detener el tiempo durante unos instantes para vivir esos momentos una y otra vez.
  •    Y el resto del día en mi familia era una locura para ir a por los regalos, aunque nos juntábamos toda la familia en una casa. Y esos días eran días muy muy especiales que han enriquecido la infancia de mis hijos y de mis sobrinos.

  •    El tema del Ratoncito Pérez ya lo expliqué en el post que os indico pero más o menos fue igual, momentos bonitos que solo se viven una vez, situaciones que los niños disfrutan con esa intensidad que solo hay en la infancia.
  •   Y cuando los niños crecieron y yo consideré que ya era el momento decidí hablar con ellos. Lo primero que tuve claro, y esto puede parecer una bobada, es que no quería decírselo justo antes de Navidad, pensaba que sus primeros Reyes sabiendo quienes eran tenían que ser en un momento en el que todo eso lo viesen con mucha normalidad, que estuviera bien asimilado, así que se lo dije más o menos en primavera.
  •    La forma era lo más difícil, quitar esas ilusiones de golpe es cruel, pero yo me imaginaba que algo sospecharían porque muchos niños llevaban tiempo diciendo que no existían. 
  •  
  •   Así que se lo dije lo mejor posible, dando un ligero rodeo pero sin irme por las ramas, les expliqué lo que a continuación os digo, pero con mejores palabras, es que ahora no las recuerdo bien pero entonces a ellos les convencieron. Bien, pues les dije más o menos que a los niños se les quiere tanto que a veces intentamos que sus sueños se cumplan y entre todos creamos mundos y personajes que no son verdad, pero que hacen la infancia más feliz, y cuando esos niños son un poco más mayores y les explicamos la verdad, ellos la entienden y como ya son mayores nos ayudan a mantener el secreto y a hacer realidad los sueños de otros niños. 
  •    Además, lo mejor de esto es que nos pueden ayudar con los regalos de los abuelos o de algún amigo, y que los suyos se van a seguir dando con toda la ilusión del mundo. 
  •   Por supuesto vamos a seguir participando en la Cabalgata, vamos a tirar confeti y vamos a poner el zapato bajo el árbol. Y en lugar de dejar galletas y leche podemos hacer algo diferente, un cambio de tradiciones, por ejemplo, ir a merendar chocolate con churros después de la Cabalgata,y las tardes con los primos van a seguir, por supuesto, y el roscón que no falte, jeje.
   La verdad es que lo asumieron muy bien, y como ya no les quedaban casi dientes por caer y los Reyes se veían lejos, la cosa quedó un poco en el olvido hasta que llegó la Navidad. 

  Lo que hice entonces fue ilusionarles igual, demostrarles que las cosas no habían cambiado, que aunque no escribieran carta a los Reyes podían escribirnos una carta a nosotros explicando lo que querían, y con los primos pues sería sorpresa(yo sí lo hablaba con mis cuñados para evitar repeticiones). 

  El día de Reyes merendábamos chocolate con churros después de la Cabalgata, a la que íbamos con algunos amigos, y la ilusión de la Navidad siguió siendo la misma.

  Además, el hecho de hacerles guardar el secreto ante otros niños y de ayudar con algunos de los regalos les hacía sentirse parte de algo importante y fue una ayuda en esta transición. 

  Y con el tiempo los regalos fueron evolucionando, los juguetes empezaron a convertirse en perfumes, instrumentos musicales, lo que ellos iban necesitando, aunque el libro sigue estando presente.

Y por supuesto, las Navidades tienen que ser blancas.


  Si os digo la verdad yo no sé si hice bien o no, creo que eso no lo sabe
 nadie, pero al menos conseguí que fueran, o más bien que fuéramos felices, y eso es lo importante, los niños tienen que ser felices y disfrutar de la infancia, que pasa en un suspiro y no vuelve y lo que no hagan entonces ya no lo harán porque no vas a decirle a un chico de 15 años, de repente que crea en los Reyes,no? Pues eso.
  
Bueno, perdonad por el rollo y recalco que es solo mi punto de vista, cada uno puede enfocarlo como mejor le parezca, yo elegí la opción más "convencional" y la verdad es que disfruté muchísimo, no cambiaría esos momentos por nada, pero cada uno puede hacerlo como crea mejor siempre que respete a los demás.
  
Y vosotros¿sois de Reyes, Cabalgata y Ratoncito o preferís que sepan las cosas tal como son? Me encantará leer vuestros comentarios y recordad que si alguien me quiere decir algo en privado tengo un formulario arriba a la derecha, y vuestros comentarios alimentan mi alma. Mil besinosssss y hasta mañana Martes.



40 comentarios:

  1. Es un tema bastante complicado, yo no tengo hijos y no he tenido que pasar por esto, pero sin duda los Reyes Magos, el descubrir la verdad, es la primera desilusion que te llevas en esta vida!!!!

    Besos

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    1. El chasco es tremendo pero claro, dejarlos sin creen y sin vivir toda esa magia...difícil decisión. Un besín.

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  2. Ufff, creo que no hay chasco más grande que descubrir q los Reyes no existen!!!! Cuando alguna compañera de clase decía que no existían, yo lo negaba, porque me parecía impensable que nuestros padres (o abuelos, tíos) pudieran comprar tantas cosas. En cualquier caso, creo que, si tu hijo lo sabe, lo lógico es que se lo calle mientras haya compañeros q sigan creyendo. Como dices tú, no a los 14 años, pero a los 10 años, ¿porqué no seguir creyendo otro añito más?

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    1. Hola CarCarmen, el chasco es brutal pero como respondo más arriba, dejar a los niños sin vivir todo eso...yo no podría. Y los niños bocazas deberían callarse que a mi hijo se lo contaban con 6 años,¡imagínate! Solo dos más que Alfonso, sino les da tiempo a saborearlo. Un besín.

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  3. Gema, pues yo creo que a su tiempo, ni es tanto chasco, ni los niños tienen por qué sufrir un trauma.
    Bien explicado, tal como tú cuentas es una verdad que tiene mucho sentido y que ayuda a mantener una ilusión y unas tradiciones que ayudan mucho a crecer.
    Creo que tú lo hiciste estupendamente y la prueba está en la reacción de tu hijo.
    Besos

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    1. Muchas gracias por tus palabras, más o menos es lo que dices, según el enfoque pues los niños se lo tomarán mejor o peor, pero es que yo no quería quitarles esa época tan bonita. Un besín y gracias por comentar.

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  4. ay marigem....me has emocionado no sabes hasta que punto, yo también viví momentos así, momentos que no volverán jamás, suerte que los disfruté al máximo. Yo hice algo muy parecido a ti, en mi caso al llevarse 5 años entre los hermanos la mayor tuvo que guardar el secreto para que el pequeño no se enterase, y yo siempre decía que ese día "algo de magia hay" para mantener la ilusión...que buenos tiempos....con mis dos niños bajo mi ala...

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    1. Ayyyy, qué recuerdos, verdad? Me alegra que te guste el post, y la verdad es que siempre se echan un poco en falta los tiempos de los niños pequeños pero oye, la magia se sigue manteniendo, hay que poner ilusión y disfrutar de esos días. Un besín y muchas gracias por comentar, me encanta lo que me dices siempre.

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  5. mis padres tambien tardaron en decirmelo todo lo que fue posible, de hecho yo fui de las ultimas de mi clase en saberlo, yo estaba tan empeñada en que era verdad que una amiga me lo dijo claramente y yo no la crei jejeje pero yo segui con la misma ilusion, al fin y al cabo son regalos, da igual si los compran los padres o los reyes jejej

    un besito!!!

    miventanafavorita.blogspot.com

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    1. Jajajaj, visto así, claro que tienes razón. Lo importante es disfrutar el momento, son etapas y hay que saborearlas todas. Un besín.

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  6. hola!!
    a todos nos ha pasado, que el típico sabiondo de la clase nos ha comentado que los reyes magos no existen, pues yo tengo casi 20 años y en casa hago la carta, voy al cartero real a hecharla con mi sobrino, y mis padres nos ponen a todos los regalos en la cama. La magia se crea y la ilusión si quieres no la pierdes! :)

    http://unchicomasenlamoda.blogspot.com.es/

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    1. Hola!!!!! Piensas igual que yo, exactamente igual, la magia se crea. Mis hijos ahora hacen esas cosas con los primos pequeños y la ilusión se sigue manteniendo, a mí me encanta preparar los regalos, y la Cabalgata es obligatoria, jejeje. Un besín y gracias por comentar.

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  7. Que época tan bonita, que ilusión, que inocencia... tengo un recuerdo precioso de esa creencia en los Reyes Magos cuando era pequeña. A mi me lo dijo un compañero de clase, se lo pregunté a mis padres y ellos me contaron todo más o menos como tu hiciste con tus hijos, pero mi hermana era más pequeña así que no le dije nada y seguí disfrutando igual o más, porque mis padres me hicieron cómplice de ese secreto hasta que ella se enteró. A día de hoy no he faltado ni a una sola cabalgata... esos días vuelvo a sentirme niña!! Y ahora con mi pequeñaja, que te voy a contar que no sepas, la ilusión es inmensa!! Este año no se enterará de mucho porque es muy chiquita, pero quiero que crea en la magia, que disfrute de esa inocencia, que sea feliz...
    Me ha encantado tu entrada!! Un besito muy muy grande.

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    1. Ayyyy, esos niños bocazas, es para matarlos pero tus padres lo hicieron muy bien, tú disfrutabas con tu hermana y la ilusión sigue ahí. Y ahora con la peque se multiplica, y aunque este año no se entere tú vas a disfrutar muchísimo, ya verás, y eso queda para siempre. Besos y gracias por comentar siempre.

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  8. Hola Marigem, te conozco de otros blogs y hoy me he animado a escribirte.

    Ayyyy qué bonito vivir en fanasía esos primeros años de nuestras vidas, creo que nadie debería privar a ningún niño ello. Qué trauma ni trauma!!!?? los traumas se dan por otras cosas, las cosas hechas con cariño y de forma natural no dejan trauma alguno.
    Fíjate que yo hasta tengo una imagen mental de ver a los reyes entrar en casa...juraría que pasó realmente, qué ilusión!!! sin embargo no recuerdo el día en que me enteré de la verdad.

    Lucho por que mi hijo crezca con esa misma ilusión. No dejemos a los niños sin infancia, no le arrebatemos esa ingenuidad que tarde o temprano perderan.

    Me ha encantado este post. Besosss

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    1. Hola!!!! Me alegra mucho que te hayas animado a comentar, y me alegra aún más que te haya gustado el post y compartas opinión. Yo si recuerdo cuando me enteré y el chasco, aunque mi madre lo suavizó mucho pero bueno, es un chasco que asimilas enseguida y disfrutas tanto. Mirando hacia atrás creo que hice bien en vivir esos tiempos con tanta ilusión, bueno seguimos viviendo con ilusión. Un besín y gracias por pasarte por aquí.

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  9. A mi me lo dijeron los mayores en el autobus del colegio y fue un chasco¡¡mi hijo de 7 años de momento sigue creyendo y el pequeño de 2 aun no se entera de nada,bss

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    1. Joooo, hay niños muy bocazas, yo nunca se lo dije a nadie ni mis hijos tampoco, los papis deberían insistir en eso cuando sus niños ya lo saben. Un besín y gracias por comentar.

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  10. Genial!, me quedo con tus palabras, para cuando me toque lo de los Reyes, me han gustado mucho :)

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    1. Graciassss!!!!! Me alegra que te sirva, pero seguro que cuando se lo empieces a explicar las palabras te salen solas y serán geniales. Un besín.

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  11. Menudo chasco se lleva uno, pero hay que pasar por ello. Besos preciosa

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    1. Jejeje, es un chasco pero también son recuerdos preciosos. Un besín.

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  12. Me ha encantado como lo has explicado todo que recuerdos me has hecho volver a ellos!yo siempre digo que la primera decepcion que se lleva uno en la vida es saber esto!besos

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    1. Hola!!!1 Sí, es la primera decepción, jaja, pero también quedan recuerdos maravillosos. Un besín.

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  13. La verdad es que en mi caso nunca he seguido estas tradiciones. Y siempre se me olvidaba de poner el dinero bajo la almohada, y los niños despues de un rato buscandolo me lo decían, y entonces yo iba corriendo a esconderlo y encontrarlo, jeje, siempre han sabido que era yo.

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    1. Bueno, el caso es que ellos fuesen felices, al fin y al cabo es de lo que se trata, jeje. Un besín.

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  14. Que época tan estupenda, a mi hija se lo contarón las compañeras y se acabo la magia, seguimos disfrutando del día de Reyes pero lo de dejar comida para los Reyes y la zapatilla...............todo era fantástico! Un besín.
    http://www.solaanteelespejo.blogspot.com.es/

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    1. Ayyyy las compañeras, apetece matarlas. La verdad es que la época de la comida, las zapatillas y todo eso es precioso, pero bueno hay que seguir disfrutando. Un besín.

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  15. A mi hermano y a toda su clase les dijo su tutora en 1º de Primaria que los Reyes Magos eran papá, mamá y el monedero. No se lloró ni nada en esa clase...

    Besos

    28+2

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    1. Ayyy, ahora el trauma me queda a mí. Pero por Dios!!!! Eso es cruel, no entiendo porqué lo hizo. Un besín y espero que no siga ejerciendo o al menos que no siga haciendo eso. Un besín.

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  16. Yo no recuerdo cómo me tomé de pequeña el descubrimiento de estas dos realidades. Pero a día de hoy ¡sigo escribiendo mi carta a los Reyes Magos! Ya es más una whislist con la esperanza de que no me traigan cutres ni cosas inútiles, pero oye,algo me queda dela esencia de la infancia.

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  17. desde luego vaya problemon, lo hiciste bien, es complicadisimo

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    1. Gracias!!!;) La verdad es que uno no sabe qué hacer para no estropearles la ilusión. Besos.

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  18. Muy interesante el tema y que bueno que tuvo un buen final :D
    En mi caso jamás me contaron nada de reyes magos, santa ni el ratón Perez así que no tuve que pasar por eso, algunos dirán que no tuve infancia (lo he escuchado ja ja ja) pero la verdad que en mi caso (y que conste que es mi humilde opinión) preferí que fuera así, no sentí que me perdí de algo y además me evité tener que pasar por la parte del desengaño ja ja ja
    Aún así, creo igual que tu que hay que respetar las costumbres de los demás y no voy por ahí diciendo a cuanto niño me encuentre que nada de eso es real, si ellos creen en eso, ¿quien soy yo para matar sus ilusiones de la infancia?
    Lo mio es de familia, así que ninguno de mis sobrinos cree en nada de eso y si llego a tener un hijo supongo que haré lo mismo, se podría decir que es nuestra tradición ja ja ja
    Ten un buen día.
    ¡Saludos!

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    1. Hola!!!! Supongo que también puede influir la zona donde vives, aquí en Navidad tenemos pajes de los Reyes Magos por todas partes, Cabalgatas y mucha publicidad.
      No creo que no tuvieses infancia, eso depende de más cosas, pero sí que me gusta mucho que no se lo digas a los demás, eso es lo más importante. Un besito.

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  19. Bueno creo que que cada cual debe mantener y creer en lo que quiera cierto es que es bonito ver a los niños felices pensando en todo ello.
    Besotes!!!

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  20. Que bonito post, aunque en estos tiempos con el internet al alcance, los niños no llegan ni a los 5 años que ya saben más cosas que uno, yo sí me lleve una decepción al saber que no existian nada de estos seres en mi infancia! Un beso.

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  21. Hola, Gema. ¡Qué gozada de post! Me encanta porque cuentas tus tradiciones familiares (que coinciden mucho con las mías), y porque me fascina la Navidad. Yo me enteré de la verdad de los Reyes porque una niña de mi clase, una envidiosa, me lo contó. Recuerdo que, como me puse a llorar mientras le preguntaba a mi madre, ella me tranquilizó y me explicó bien las cosas, como tú has hecho con tus hijos, y me pidió ayuda para seguir haciendo mágica la Navidad para mis hermanos. Eso me hizo sentir bien. Creo que tu postura es más que correcta, y que tus hijos siempre agradecerán las fiestas de su infancia que les has ofrecido.
    Un beso enorme, feliz semana, Gema

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  22. Hola! Yo me enteré porque me lo dijo una niña mayor en el cole. Guardé un año más en secreto que me había enterado, pero al final lo conté...
    Ojalá pueda mantener la ilusión de mis peques mucho, mucho tiempo, como tú, más allá de que crean o no en los Reyes, porque además, ¿Sabes?, Sí que existen. ;)

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