jueves, 18 de abril de 2024

Reflexión: ¿debo seguir con el blog?

Jueves reflexivo: dudas, indecisión y falta de tiempo 

Hola a todos y bienvenidos un día más. Hoy es jueves y toca post improvisado, así que sin más rollo, empezamos.

amanecer

Últimamente he leído en algunos blogs muy queridos que dejan este mundo bloguero. La causa suele ser un poco de falta de motivación. Pues yo ando un poco así. En mi caso no es falta de motivación, ni me faltan ideas, en realidad me sobran, aunque no se materialicen. Creo que es más bien el ritmo de vida.

Además de tener mis obligaciones, como todo el mundo, cuido un montón de animales, que eso lleva tiempo porque no es que los tenga a todos en casa, que me ahorraría tiempo.

Además, les dedico tiempo de calidad porque me gusta estar con ellos.

Y me gusta cultivar, y eso sí que lleva tiempo. Entre semilleros, pasar a tierra, regar, quitar malas hierbas, arar...

Y quiero retomar la escritura, llevo mucho tiempo pensando en publicar en Amazon, he rechazado algunas propuestas editoriales porque no me convence la manera de funcionar de las editoriales, valga al redundancia. Y eso también lleva tiempo.

No paro de repetir la palabra tiempo, pero creo que todo ese reduce a eso.

Y quiero vivir. El domingo estábamos en casa de un familiar, en el jardín, y me sentía muy feliz hablando, entre personas y perros. Y de repente, recordé que no tenía el post preparado y me agobié. Y el blog no es un lugar para el agobio.

En julio este rincón cumplirá trece años. En este tiempo me ha pasado de todo. Empecé con dos adolescentes y ahora tengo a dos adultos que vienen y van por temas laborales, pero que siguen siendo mis tesoros.

Tenía a mis padres, a mi tío y a algunos amigos que en este tiempo se han ido, y me he quedado devastada.

También he publicado dos novelas, he viajado, he conocido gente nueva, sigo con mi círculo de siempre, he redescubierto el mundo perro y he despedido a algunos gatos con todo el dolor del mundo.

No quiero dejar el blog por ahora, pero me cuesta compatibilizarlo con la vida. Escribir las entradas no es tan difícil. Esta en concreto, al ser sobre la marcha, no me quita demasiado tiempo. Otras en cambio me llevan un buen rato. Pero es que además hay que visitar a las personas que nos leen, cosa que hago encantada. Pero es más tiempo. Y me agobia ver comentarios sin respuesta. Y entonces, ese hobbie que tanto me ha aportado, se convierte en una obligación que pesa. 

El otro día hablaba con mi hermana de momentos de esos que sin ser especiales son muy especiales. Y recordé una tarde de verano en la que nos fuimos mi marido, mis hijos, mis padres y yo, a la finca de mis suegros, para regalarles a mis adres unas semillas y unos planteles.

Era un día de verano y mis hijos jugaron con sus primos y sus cuatro abuelos sin parar. Nosotros bebíamos la sidra que hacía mi suegro, charlábamos y reíamos. A la hora de marchar nosotros nos fuimos a casa, porque los niños eran pequeños y tenían que bañarse y cenar. Mis padres se fueron a casa de mis suegros. Como fue algo improvisado mi suegra no tenía una cena propiamente hecha, pero sacó jamón, queso, cecina y cosas así, además de una tortilla que hizo en ese momento. Pues mis padres decían que una cosa tan sencilla les había encantado, y tenían ese día entre sus recuerdos queridos. Y eso busco, llenarme de recuerdos, de días especiales cada día, sin que en realidad sea un día especial.

Ayer por la noche, durante el paseo nocturno, coincidí con una chica que tenía un perrito. Y de pronto ella me pregunta si me llamo Gemma y si fuimos al mismo instituto. Era una amiga a la que perdí la pista al pasar los años. Pues se había trasladado bastante cerca de donde yo vivo, y ahora con los perros volveremos a coincidir. Estuvimos un buen rato hablando de amigos comunes y de aquella época. Y eso me hizo reafirmarme en que quiero vivir el presente al máximo.

Y toda esta divagación para decir que, de momento, sí voy a seguir por aquí, pero me asaltan dudas. Iré poco a poco, sin agobios, porque, por un lado me da mucha pena dejar este mundo, a la gente con la que me he encariñado, los blogs que tanto disfruto y ese cúmulo de recuerdos. Pero por otro siento que a veces hay que pasar etapas. Haga lo que haga lo diré por aquí. Y mientras tanto me pasaré por vuestros blogs, que esta semana no he podido, y responderé a todos esos comentarios preciosos que me dejáis. Mil gracias por leerme y hasta el lunes.

18 comentarios:

  1. Nadie mejor que tu sabe si le puedes o no dedicar tiempo a escribir, si lo que te sale merece o no ser leido, si tienes ganas, etc...,como bien dices, hay algunos antiguos blogeros que lo están dejando, es entendible, algunos de ellos se pasan a otras redes sociales más faciles de llevar, sea lo que decidas los que te leemos tenemos que aceptarlo, no faltaría más, mientras eso llega, aquí estaremos.
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Me daría mucha lástima si lo dejas. Yo seguiré por aquí porque necesito escribir. Un beso

    ResponderEliminar
  3. Yo sigo con el blog y pienso seguir haciéndolo, porque puedo sacar tiempo para seguir publicando y visitando a otros compañeros. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, el mérito de mis publicaciones (no la calidad) es inferior, puesto que pongo muy poco de mi cosecha (escribir) y tomo prestadas mis entradas (últimamente vídeos de José Mota). En los doce años largos que llevo con él, lejos de quitarme tiempo para escribir, puedo agradecerle haberme “obligado” a hacerlo con regularidad y, gracias a ello, he editado dos libros que proceden de entradas en el blog. Como ves, hasta ahora no me supone un agobio. El día que así fuera, supongo que estaría con las mismas dudas que tú.
    Feliz día.

    ResponderEliminar
  4. Creo que cada uno debe hacer lo que más le convenga, desde luego el blog no es sitio para agobiarse.. que no puedes publicar, no publicas, que hoy te apetece sentarte y divagar, pues divagas... a tu ritmo.. esto es un hobbie, no una obligación.

    ResponderEliminar
  5. no me gustaría que lo dejaras, pero claro, debes decidir lo que sea mejor para ti.
    los blogs tienen una magia especial que no la pueden sustituir otras redes sociales.
    las despedidas las llevo fatal, aunque parezca una chorrada. ya sea que un blog que me gusta deje de publicar, o que en un restaurante donde voy ya no esté una camarera amiga mía. debe ser algún trauma de abandono no resuelta, o un síntoma neurodivergente.

    ResponderEliminar
  6. El único consejo que se me ocurre es que publiques con menos frecuencia, sin imponerte un calendario, simplemente cuando tengas algo que quieras compartir. Yo tambiñne llegué a un punto, hace años, en que me oblgaba a escribir, siguiendo las recomendaciones de los profesores de escritura creativa, y ello me llegí a agobiar, hasta el ounto que mi mente ya no daba más de sí para elaborar nuevos relatos. Asi que decidí, tomarme mi tiempo para ir publicando y solo cuando creía tenef alguna historia mínimamente interesante. Otro motivo para dejarlo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sorry, se me ha disparado la publicacion de mi comentario antes de terminarlo (de ahí los gazapos, que no he tenido ocasión de corregir).
      Decía que pensé en abandonar mis blogs debido a los pocos comnetarios que reciben, pero luego pensé que esto es lo de menos, pues lo importante es tener ganas de escribir. Y escribo, pues, cuando tengo ganas, je, je.
      Un abrazo.

      Eliminar
  7. No sabes cómo te entiendo porque estoy en la misma situación. Eso de estar tan feliz y de pronto pensar que tienes a medias una reseña o sin empezar, la sensación de que es un trabajo, me está dando cada vez más que pensar. Me lo estoy tomando con mucha calma y he pasado de reseñar todo lo que leía a que cada vez queden más lecturas sin aparecer en el blog. Trato de hacer lo que dice Josep Mª, publicar sin fecha, cuando cuadre. Ya lo hago en parte, porque antes publicaba cada tres días y ahora lo hago sin esa condición, pero así todo a veces siento esa sensación del trabajo sin hacer. Y es que un blog lleva mucho tiempo, como dices, porque hay que leer a la gente que sigues y comentar y contestar a los que te comentan, y todo eso lleva más tiempo que las propias reseñas. Y además siento que el blog me quita tiempo para leer. Yo también seguiré por aquí, pero intentando tomármelo cada vez con más calma.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Por lo que nos comentas llevas una vida muy activa. Yo llevo ya unos años jubilado y de momento tengo algun hobbie, ademas de salir a caminar a diario y hacer algun viaje por la peninsula casi todos los meses.
    Nunca me he considerado un esclavo del blog, pero con el tiempo he ido espaciando las entradas.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Te entiendo porque a veces me pregunto lo mismo, debes valorar que es lo que realmente te hacer feliz y dedícale tiempo a eso y si el blog es parte de lo que te hace feliz estaremos encantados de seguir leyendo tus post. Un abrazo

    ResponderEliminar
  10. Buenos días Gemma,
    Te cuento que a mí me asaltan las mismas dudas. Poco a poco he dejado de escribir y he relegado el blog al último reducto de mi vida porque apenas enciendo el ordenador, que es donde me gusta escribir, y cuando consigo encenderlo ya no se me ocurre qué escribir. Otras veces, sin embargo, siento la necesidad de escribir y plasmar algo y muchas veces no puedo al no disponer del ordenador, no ser una hora adecuada, tener que hacer otra cosa... Y el tiempo va pasando y como que ya apenas siento la necesidad de meterme, como que ya no forma parte de mi vida. Y cuando me acuerdo de él me entristece pero esa la realidad.
    Así que yo haré como tú, cuando surja. Y a ti te animo a que continúes pero que nunca sea una obligación. Yo no me marcaría fechas x de publicar, sino que lo haría cuando me apeteciera y tuviera tiempo.
    Por cierto, que bonita casualidad el reencuentro con aquella vieja amiga.
    Besos

    ResponderEliminar
  11. Creo que lo que mas agobia es contestar los comentarios y pasar por otros blogs. En ese caso no es tan indispensable, es decir, que te sea una carga. Se publica cuando se puede, se visita cuando se puede, nadie se va a ofender. Saludos y no abandones!

    ResponderEliminar
  12. Por esa tesitura he pasado yo en varias ocasiones. Como bien dices, hay entradas que apenas suponen esfuerzo, pero otras llevan su trabajo y su tiempo y tampoco es que a uno le sobre ese preciado tesoro.

    ResponderEliminar
  13. Has lo que te haga feliz. A veces el blog quita tiempo pero tambien da alegrías. Te mandó un beso.

    ResponderEliminar
  14. Hola, Gemma.
    Te entiendo. La vida a veces imposibilita formar parte del blog, y no porque tenga que ser algo malo, sino porque el tiempo es el que es. Por lo que no debería ser concebido como una obligación. Es más, si un día no cuelgas una entrada, pues no pasa nada, lo harás otro día o cuando puedas, quieras o así lo sientas. Pero para ti, siempre debe ser así.
    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
  15. Yp también lo he leido en otros blogs y estoy un poco como tu... Antes tenia menos tiempo libre y tenia todo super programado y controlado pero ahora no y como tu bien dices no es por falta de contenido xk realmente me sobra es por las ganas y asi que ahora suelo publicar un post a la semana o cada dos. Lo que si estoy más activa es por instagram y youtube
    bsss

    ResponderEliminar
  16. Creo que todos hemos pasado por esa etapa. Los consejos que te dan los comentaristas que me preceden son los que yo mismo he seguido: publicar con menos frecuencia, solo si te apetece o tienes algo que contar, sin que te suponga un trabajo. Yo al final publico cada quince días más o menos, excepto si estoy siguiendo un festival de cine, que lo hago a diario. Muy lejos de cuando empezaba con el blog que publicaba varias veces a la semana.
    Abrazos!

    ResponderEliminar
  17. Hola, Gema. Te entiendo perfectamente. El blog lleva tiempo, pero si te llena y motiva lo mejor es seguir, aunque en mi caso por ejemplo, prefiero dedicar menos tiempo, y en vez de escribir todas las semanas (cosa imposible en mi caso ahora), pues es cada 2 semanas, 1 mes, no tenga ninguna fecha en concreto, y no quiero que sea una fuente de estrés innecesaria y añadida. Dejar fluir y escribir y compartir cuando se pueda y apetezca.
    ¡Un abrazo gigante!

    ResponderEliminar