lunes, 27 de enero de 2025

Reseña: El hombre que amaga a los perros de Leonardo Padura

Reseña de El hombre que amaba a los perros de Leonardo Padura

Hola a todos  muy bienvenidos un día más. ¿Qué tal ha ido el finde? Espero que muy bien. El nuestro ha sido tranquilo: campo, familia, algún paseo, una serie e incluso nos hemos relajado  filosofado con antiguas entrevistas de Antonio Gala.

Hoy vengo con una reseña. Por lo general me gusta traer libros distintos y poco conocidos, pero a veces hago alguna excepción y hoy es uno de esos días. Y ahora, sin más rollo, empezamos.

Me costó empezar con Leonardo Padura, mi hijo había ido a encuentros con él, y tenía en casa algún libro, pero no sé qué pasaba que no empezaba. Hasta que empecé, y me atrapó. Una de las razones que me empujaron a empezar fue leer a Rosa, pues a ella también le gusta Leonardo Padura, y sus reseñas siempre me crean necesidades lectoras.

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He elegido El hombre que amaba a los perros porque me parece buenísimo, aunque, ya os digo que es un libro concreto para gustos concretos. No es el primero que leo de él (la serie Mario Conde, el detective, no el banquero, es también estupenda) y todos me gustan, pero quería hablar aquí de este novelón.

Confieso que lo tenía en casa, pero acudí a un encuentro con él en La Semana Negra y lo compré para que me lo dedicara.  Lo leí este verano, con calma, sin prisa, y deleitándome.

La obra trata, en realidad, sobre el asesinato de Trosky.  Está contado a tres voces. Por un lado tenemos a Iván, un cubano que conoce, en una playa bordeada de casuarinas, a un hombre con dos preciosos galgos rusos borzoi que le cuenta la historia de Ramón Mercader, el asesino de Trosky. Nos habla de la infancia, la influencia de su madre, sus inicios en el comunismo, de  Guerra Civil española… La historia de Iván y la de Cuba se van entremezclando, y atrapando.

Por otro lado tenemos la historia de Trosky desde que se exilia de la URSS, sus “aventuras” en Turquía, sus desgracias familiares, su historia con Frida Khalo

La forma de narrar de Padura es extraordinaria. Logra captar toda mi atención. Cuando Ramón Mercader está a punto de matar a Trosky con el piolet genera una tensión que solo un maestro puede hacer. Todos sabemos como muere Trosky, sabemos lo que va a ocurrir, y aún así, atrapa de tal forma que nos inquietamos de esa manera en la que nos inquietamos leyendo algo por primera vez y no sabemos si va a pasar o no. Pero la maestría está en que aquí, sí lo sabemos, y logra “sorprender”.

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Siempre digo que no se me da nada bien escribir reseñas y no sé si estaré expresando bien todo lo que quiero comunicar.

Para ir finalizando, os diré, que independientemente de lo bien escrito que está, hay un trabajo de investigación exhaustivo. Si excluimos la parte novelada, casi es un ensayo. Es tan concienzudo que logra que pasemos frío en Siberia, calor asfixiante en Cuba  nervios en la España dividida por la cruenta guerra. Consigue que estemos en una taberna de Moscú, bebiendo vodka envueltos en ropa caliente, y en un sofisticado apartamento en París, con Ramón Mercader y  la muchacha a la que engatusó para introducirse en el círculo de Trosky.

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Y a para terminar os digo que si os gusta la literatura histórica, la historia rusa , los libros extensos y meticulosos,  llenos de información, y las historias contadas por varias voces os la recomiendo encarecidamente.

Si os agobian los libros muy largos, los nombres en ruso y la literatura histórica, mejor lo dejáis pasar.

Y hasta aquí la entrada de hoy. Mil gracias por leerme y nos vemos el miércoles con algún truco.


12 comentarios:

  1. Como lector de novela negra , hay que leer a Padura y su detective Mario Conde un personaje derrotado, borrachin y gran fumador, es un autor que te cuesta entrarle pero una vez cazado te atrapa y no puedes dejar de leerle.
    Saludos

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    1. Totalmente, a mí me costó empezar pero luego me atrapó.
      Muy feliz día.

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  2. Tendrè que probar algún libro suyo. Un beso

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  3. Ay, Gemma, mil gracias por la mención. Casualmente ahora estoy con un libro de Leonardo Padura, Paisaje de otoño, el cuarto de Mario Conde. Es la única serie que he leído en total desorden, pero igual la estoy disfrutando.
    El hombre que amaba a los perros fue lo primero que leí del autor y me cautivó por completo. A día de hoy, creo que sigue siendo la novela de Padura que más me ha gustado, junto a Personas decentes, la última que leí en la que sale Conde, pero en la que hay otra historia de tiempos pasados mucho más interesante. Si no la has leído te la recomiendo.
    Un beso.

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    1. De nada! Tus reseñas me avivaron las ganas de leerlo.
      No la he leído, está esperando y sé que me encantará..
      A mí El hombre que amaba a los perros me cautivó. Entiendo que es larga, mucha información, muchos nombres en muchos idiomas, pero atrapa. Casi podía ver a los preciosos perros corriendo por la plas, al hombre entre las casuarinas y también me imaginé esa Cuba en los setenta vista por un estudiante.
      Ojalá pueda ir a más encuentros con él y seguir disfrutando de sus lecturas.

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  4. Sin duda, contar una historia que es de sobra conocida y conseguir atrapar la atención del lector es una habilidad reservada a grandes escritores.

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  5. Un libro a tres voces y con esa narración extraordinaria es la celebración de la literatura. La historia de Trosky es tan fuerte que daría para seguir escribiendo y haciendo cine sobre su visa.
    Abrazos y buen comienzo de semana.

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  6. Antonio Gala convertía en espectáculos las entrevistas que le hacían. Me quedaba embobado escuchándole.
    No he leído nada de Leonardo Padura. Gracias por presentárnoslo.
    Feliz semana.

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  7. Es un gran mérito llamar la atención, contando una historia que es tan conocida, como la de Iván Trosky.
    Un abrazo.

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  8. Gracias por la reseña. Tomó nota. Te mando un beso.

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