jueves, 5 de diciembre de 2019

Una pequeña reflexión


Una reflexión muy personal sobre infancia y felicidad.

Hola a todos. Hoy toca post improvisado, pero llevo una semana algo complicada y me he levantado justa y me voy en breve, así que se me ha ocurrido rescatar un post antiguo.

Es la primera reflexión que escribí en el blog, tiene 8 años y la he dejado sin tocar, tal cual estaba, excepto  por el vídeo que comparto, que me apetecía. Espero que os guste. 

Hola a todas, chicas,¿que tal estáis? Bueno, como siempre, espero que bien y disfrutando todo lo que se pueda del veranito.

    Hoy, más que anécdotas o ideas, quería hacer un poco de reflexión acerca de la manera de disfrutar de la infancia de nuestros hijos, sobre todo cuando tenemos poco dinero. En mi humilde opinión, creo que lo más importante es buscar esas pequeñas cosas que nos hacen la vida más feliz y encontrar la manera de salir a la calle con ellos sin gastar, pero claro, sin que se note que queremos salir sin gastar. Vale, vale, me explico porque dicho así suena a tontería.

   Yo conozco a bastantes personas que cuando tienen poco dinero disponible para salir se quedan en casa porque saben que si van a  algún sitio con sus hijos, éstos seguramente les van a pedir que les compren algo. En una entrada que tengo más atrás, cuando hablo de un día que fuimos a coger moras, explico que a mí también me ocurre lo mismo si me quedo en la ciudad. Por desgracia, el concepto de sacar a un niño a pasear a veces, muchas veces más bien, incluye kiosco, helado o algún otro gasto. Por eso lo ideal es buscar opciones que no inciten a gastar, pero haciendo ver a los niños que es algo divertido y presentándoselo de forma atractiva para que les apetezca ir.

  En casi todas las ciudades tenemos algunas actividades gratuitas, actuaciones de magos o payasos, títeres, actuaciones en la calle de grupos de música. Una buena idea es enterarse de antemano de esas actuaciones, por ejemplo mediante Internet, y luego hablarles a los niños de ellas con entusiasmo, para que quieran ir. Aquí en mi ciudad hace ya años que hay actuaciones en la calle muy variadas, y durante el invierno obras de teatro gratuitas, así que hay bastante para elegir.

    Si nosotros les decimos lo divertido que va a ser, si mostramos euforia e ilusión en lugar de lamentarnos delante de ellos por tener que “tragarnos” una obra infantil en lugar de sentarnos en una terraza, seguro que ellos van con ilusión. Y claro, para completar debemos llevarles la merienda y agua de casa, para que no nos pidan nada y tengamos que decirles que esperen hasta que lleguemos a casa porque se nos ha “olvidado” coger dinero.

    Si vivimos en un sitio con playa, yo recomiendo ir todo lo que se pueda, ya que es algo que solo podemos hacer en verano(para bañarnos, en invierno podemos ir a jugar) y en cambio otras cosas podemos dejarlas para el invierno. La playa es la solución ideal, puedes pasar toda la tarde, los niños no se aburren porque si se cansan de la arena pueden ir al agua y cuando cansen del agua volvemos a la arena. Y los juguetes de playa pueden usarse más de un verano, así que son todo ventajas. Y claro, si se lo enfocáis de manera divertida, y si en lugar de decir; - hoy tengo poco dinero así que vamos a la playa, - les decimos algo así como; - ¡Qué día tan bonito! Hoy podemos ir a la playa y merendamos allí para que te puedas bañar más tiempo, - ellos irán encantados. Y si el día está realmente bueno podemos llevar hasta la cena, los duchamos en la misma playa y llegan a casa cansados pero felices y listo para ira la cama. A lo mejor os parezco una tonta, pero yo disfruto mucho preparando todo lo que voy a llevar a la playa, y mientras voy llenando mi bolsa me imagino lo bien que lo vamos a pasar.

     Aquí en el norte tenemos el problema del mal tiempo. Si el día está malo, parece que ya implica un gasto porque claro, tienes que ir al cine (realmente prohibitivo, o al menos aquí es carísimo), o a una cafetería, lo que implica gastar y tampoco soluciona porque un niño no aguanta una tarde entera en un bar. 

    Yo para esos días siempre he buscado distintas alternativas. Si el día está nublado pero no hace frío, suelo ir a algún merendero o área recreativa cercana, cargada con balones y juguetes para pasar toda la tarde fuera, y en otras ocasiones hacemos algunas de las sendas verdes que hay en la ciudad, pero el lugar de hacerla andando la hacemos con bici, para variar un poco y de paso hacemos todos ejercicio. 

    Los niños en general disfrutan mucho andando en bici, e incluso, si alguno no tuviera bicicleta, pueden ir en patines o patinete, el caso es darle a la excursión otro aire. Y por supuesto, llevamos merienda y a veces, también la cena. Y si no os apetece hacer ejercicio, podéis buscar algún parque de esos a los que nunca vais y que solo por la novedad, suelen gustarles y pasarlo muy bien. 

    Cuando mis hijos eran algo más pequeños, los he llevado en alguna ocasión a parques a los que normalmente no iba porque hacía mucho calor, o porque eran muy pequeños, bueno, eran parques a los que no iba por diversas razones, y el día que los llevaba eran una novedad y disfrutaban como si los hubiera llevado a un parque de atracciones, pero claro, primero, antes de salir de casa les hablaba de él con entusiasmo, aunque sin exagerar para que no se llevaran un chasco al ver un parque pequeñito. Y muchas de esas veces traíamos para casa hojas o alguna piedra y así podíamos hacer alguna manualidad porque claro, esos días volvíamos más temprano que los días de playa o área recreativa.
    
     Si llueve o está frío, es más difícil encontrar algo que hacer. Lo ideal en estos casos es enterarse de los días gratis de los museos de la ciudad y de las exposiciones que pueda haber interesantes. Cuando ya sepamos lo que hay gratuito, buscamos algo que les guste, porque es cierto que un niño pequeño en un museo puede llegar a aburrirse mucho. 

   Si sabéis de alguna exposición que sea interactiva y que los niños puedan participar, ya sea haciendo manualidades o tocando algún botoncito en alguna de las piezas a exponer, depende, llevadles porque esas cosas suelen gustarles. Y si el museo es de pintura, por ejemplo, yo lo que hacía era informarme bien de lo que había para ver y en lugar de obligarles a verlo todo les enseñaba solo lo más interesante y les contaba lo que yo sabía con palabras fáciles de entender, huyendo de las visitas guiadas que a los niños pequeños les cansan demasiado.
     Yo creo que por poco dinero que se tenga, y hablo por experiencia, a los niños hay que darles una infancia lo más feliz posible, y hacerles ver lo bien que nos lo pasamos aunque salgamos sin gastar. 

 En el vídeo tenéis un medley de Los Miserables precioso, en especial los primeros 2 minutos

    Por supuesto, si otro día podemos, nos vamos a tomar algo a algún sitio, o compramos unos helados, pero creo que debemos hacerles ver que el hecho de haber gastado dinero no hace que ese día sea mejor que el día en que no hemos gastado. De hecho, mis mejores recuerdos son de días en los que no gasté demasiado o más bien nada, pero que al final son días  llenos de risa y alegría.
    Como hoy estoy reflexiva, me he acordado de mis abuelos. Cuando ellos se casaron no tenían nada, pero nada de nada, y cuando tuvieron a sus dos hijos su situación seguía siendo muy precaria con una guerra aún en el recuerdo cercano, y aún así, jamás perdieron la ilusión. 

    Mi madre siempre recuerda la infancia tan feliz que tuvo a pesar de las dificultados. Ellos casi siempre estaban sin dinero, pero jamás se quedaron en casa. Salían todos los días, y por el verano, muchas de sus excursiones consistían en lo que ellos llamaban amortizar, que no era otra cosa que de la que paseaban recogían piñas y leña para tener con qué encender la cocina en invierno, o moras para comer, o castañas, o incluso manzanilla para tener en casa. Esos días, además de coger algo para mejorar un poco su calidad de vida, estaban todos juntos y hablaban, y eso en el fondo es lo que yo pretendo, en lugar de ir cada uno con su mp4 y los niños jugando a la consola. Juntos pero ignorándonos unos a otros. 

   Yo creo que el aire libre y la comunicación son una estupenda base, eso y buscar excusas para estar juntos.  Muchas veces, como siempre digo, hace más el que quiere que el que puede.
   
    Así que ya lo sabéis, demostrad alegría por el simple hecho de poder disfrutar de una tarde con ellos, da igual donde vayamos, y aprovechemos los momentos que el tiempo vuela y cuando queramos darnos cuanta nuestros niños ya han crecido y al final lo que queda son esos instantes que hemos compartido.
     Bueno chicas, creo que por hoy ya os he aburrido bastante con reflexiones y melancolías, así que os dejo, y mientras, sigo reflexionando. Y espero, a pesar de la melancolía, haber dado alguna idea para hacer cosas divertidas sin gastar.
La foto que os pongo es un busto del hijo de Cousteau, y es una maravilla, está puesta en una roca y es impresionante. Espero que os guste y que vayais a verlo. 

Mil besos y abrazos para todas.

Y aquí termina el post. Las cosas han cambiado mucho desde que lo escribí; mis hijos son mayores, he perdido a dos familiares muy muy directos y queridos y mi situación económica ha mejorado. Pero a pesar de lo mucho que he sufrido sigo manteniendo gran parte de la ilusión que tenía esos días. Y sigo disfrutando con el blog.

Otra cosa que veo ahora con perspectiva, es que el hecho de no dramatizar delante de mis hijos(tenerlos en una burbuja tampoco, todo en su medida) hace que recuerden su infancia y adolescencia con cariño, sin que el revés económico sea el protagonista.

Sé que voy atrasadísima con los comentarios y con vuestros blogs, intentaré ir poniéndome al día a ratitos.

Muy feliz día y feliz puente. 

38 comentarios:

  1. Q linda eres Mara, tu blog esta lleno de aprendizaje, me gusta leerte porque aunque estemos al otro lado del mundo, es bueno saber que hay mujeres tan buenas como tú

    ResponderEliminar
  2. Hola, encantada de conocerte, gracias por pasarte por mi blog,ya me diras que tal te sale el pan. Y de modesto el blog nada, me parece muy interesanta y mas esta entrada yo tambie tengo dos hijos y muchas veces no sabes donde ir sobre todo en invierno, nos vemos un besico de una mañica.

    ResponderEliminar
  3. Gracias a las dos por vuestras palabras y en cuanto haga el pan, te cuento.Besinosssssss.

    ResponderEliminar
  4. como siempre muy acertada,los niños de hoy en dia (y creo que no exagero nada)son muy materialistas,pero creo que la culpa es nuestra,que nos parece que todo se arregla con dinero

    ResponderEliminar
  5. Yo entiendo que intentemos arreglarlo todo con dinero, pero si no abunda debemos buscar otras opciones y a la larga creo que es mejor así. Espero que estas reflexiones puedan ayudar un poquito a alguien.Te leo María Luisa.

    ResponderEliminar
  6. nosotros vivimos una crisis grande, y digamos que no nos hemos recuperado, pero Alejandra nunca ha sentido esa escasez o esa falta de trabajo, si bien como bien dices no ha estado en una burbuja y sabe lo que hay. Me alegro haber leído este post antiguo. Buen fin de semana y puente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Ufffff, es que cuesta recuperarse. Yo sigo teniendo flecos, pero intento ser feliz, que no es poco.
      Feliz día.

      Eliminar
  7. me ha encantado tu post. Veo que, con mayores o menores dificultades, siempre has mantenido la ilusión y las ganas de disfrutar y hacer disfrutar a los que tienes alrededor.
    El afán consumista de los niños es terrible. Mi hijo nunca me pedía nada de comer porque era un niño que comía muy mal y por no gustarle no le gustaban ni las chuches, pero a veces me decía "cómprame algo" y yo le decía "¿quieres un bollo de pan?" y él contestaba "no sé, algo". Le daba igual, el caso era que le comprara algo. casi nunca lo conseguía el pobre.
    Yo creo que haya o no dinero no se les puede consentir ese consumo desmedido. Tienen que saber que uno no puede conseguir siempre todo lo que quiere.
    Me ha gustado mucho leer a la Gemma de hace ocho años.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Me alegra que te guste el post.
      Mi hijo también comía fatal, tampoco le gustaban las chuches, así que en ese sentido no había problemas.
      Jajaj, pobre, él solo quería comprar por comprar.
      Yo he intentado dar a mis hijos todo, y tener detalles y sorpresas. Pero he intentado que valoren las cosas que no compra el dinero. Ir a ver una peli al cine, con palomitas y refresco, era una opción genial que hacíamos mucho, pero pasar la tarde en un prado, con la meriena de casa, jugando al balón, era igual de genial.

      Muy feliz miércoles Rosa.

      Eliminar
  8. Excelente tu post, no importa el tiempo que haya pasado se disfruta lo mismo y coincido en todo, porque he tenido los chicos chicos, porque he estado falta de dinero y de trabajo lo que es peor, pero si se ama con fuerza todo se supera, tambien he perdido gente muy cercana en el lapso de tres años, y nos toca seguir pa adelante por nosotros, por ellos y porque la vida es una y hay que disfrutarla y vivirla con todo lo que nos toque. Feliz semana y nos estaremos viendo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Veo que coincidimos en experiencias. Lo importante es superar las dificultades e intentar ser felices.
      Muy feliz miércoles.

      Eliminar
  9. yo tengo buen recuerdo de cuando me llevaban al tiovivo o a la cuesta de moyano (el mercadillo de libros y comics antiguos). pero eso ya implicaba gastar algo de dinero, lástima! ^_^
    pero, pensándolo bien, también me gustaba cuando mi padre nos llevaba a ver otros barrios de madrid, y simplemente paseábamos por allí sin comprar nada.
    pero vamos, de lo que cuesta un tebeo o un viaje de tiovivo a lo que cuesta un smartphone, que muchos niños tienen, hay un abismo. nosotros vivíamos felices con menos.
    besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Ay la Cuesta Moyano, estuve hace ya 11 meses, qué nostalgia.
      Me encantan esos recuerdos, yo los tengo muy similares.
      Yo creo que lo ideal es el término medio. Conozco gente(y bastante) que solo sale cuando tiene dinero para gastar. En mi caso, tanto en mi infancia como en la de mis hijos, salíamos todos o casi todos los días. Un par de veces al mes nos íbamos a comer de restaurante en distintos pueblos de Asturias, a veces con mis abuelos, mi tío mi tía abuela. A veces salíamso por Gijón y nos compraban un premio(tebeo, libro, sobre sorpresa, vestidito para la Nancy...), otras íbamos al cine o a merendar, otras a ver algún espectáculo...pero otras eran días de playa, en la finca, o a buscar luciérnagas cuando mi paddre salía de trabajar. Vamos, qu eno se gastaba o gastábamos muy poco y mi madre ponía la misma ilusión. e hecho tengo fotos de esos momentos qu eno tienen nada pero son mágicos.
      Lo importante es valorar que podemos ser felices, una conversación, una risa, un juego tonto...
      Muy feliz día y siiii, éramos muy felices con menos.

      Eliminar
  10. Tu carácter positivo —parece que heredado de sus antecesores— es ideal para vivir un periodo con problemas económicos, sin que se note en la felicidad de los más pequeños.
    En ese momento parece que solo esperabas que te leyeran chicas. Pues no, mira por donde. A los chicos también nos gusta mucho leerte.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Eso he intentao, que los niños crezcan felices, a veces es complicado pero se puede.
      Jajajaja, es que por aquellos antes solo me leían chicas, de hecho había pocos blogs de chicos.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  11. nosotros también éramos expertos en salir sin gastar. Un beso

    ResponderEliminar
  12. Querida Marigem, venir a tu blog es siempre una delicia. Tienes soluciones para todo, y eso es magnífico. Nos has dado una gran lección sobre cómo debemos disfrutar con nuestros pequeños, cómo hacerles valorar lo importante que es estar en familia, reir juntos, compartir ilusiones y momentos,dialogar...Las cosas más bonitas y más importantes que hay en la vida no cuestan dinero, y disfrutar con los niños, hacerles felices, tampoco tiene por qué costar nada. Cuando los niños se ponen pedigüeños es porque nosotros se lo hemos enseñado, pero debemos mostrarles que lo importante es estar juntos y pasarlo bien en familia.
    No tengo más remedio que felicitarte por todos los buenos consejos que nos das, no solo en esta entrada sino en todas. Nos haces amar la vida, ver todo de una manera más optimista, sin agobios y dando importancia a las cosas pequeñas, que es lo principal en la vida. Muchísimas gracias. Feliz puente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Ay muchas gracias por tus palabras.
      Yo no creo que tenga soluciones para todo, más quisiera, pero sí que he visto siempre qu ese puede pasar genial de muchas formas y he intentado hacerlo.


      Muchas gracias, de verdad, por tus palabras, y muy feliz día.

      Eliminar
  13. Es que la felicidad no es algo que nos venga de fuera, es algo interno. Y siendo así en cualquier parte podemos pasar un buen rato disfrutando, no son necesarios grandes viajes o enormes planes. Solo basta con tener la capacidad de disfrutar de buena compañía para sacarle partido a cualquier cosa. Un abrazo!

    ResponderEliminar
  14. Agradezco humildemente a Dios ya que me dio la salud y la paz del corazón y la alegría. Dios también me dio un capital razonable y sobre este decidí ayudar a los gente que necesitan ayuda. Dios lo ayudó en que me daba mucho dinero entonces por qué no ayudar a mis hermanos y a hermanas que tienen proyectos rentables pero que no tienen los medios para terminar sus proyectos ? Soy un hombre muy simple, soy cristiano catolico y tengo el temor de Dios y por este mensaje le digo que es aún posible. Si está en la necesidad de préstamo, financiación o inversión entonces estaré dispuesto enteramente para ayudarle. Puede también contactarme si necesita un crédito para pagar las escolaridades de sus niños, comprar una casa, una parcela, pagar los gastos médicos o de operaciones quirúrgico y otras. Créa me ya que sus soñados el lo más caro posible se realizarán gracias mi puede que es Dios que me guia. Contácte me rápidamente solo por correo si necesita préstamo de dinero, crédito, inversión y otros. Gracias

    Correo : simondurochefort@gmail.com

    ResponderEliminar
  15. No por mucho dinero que se tenga, necesariamente se disfruta más. Muchas veces los planes más sencillos son los que nos traen más satisfacciones. La improvidación y la aventura valen mucho más. Es cuestión de imaginación y de voluntad.
    Y aunque el tiempo pase inexorablemente seguimos haciendo las mismas cosas aunque con más años a cuestas, je,je.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Eso creo yo. A ver, que he viajado bastante y me encanta, y he hecho muchas cosas, pero cuando hay que hacer planes económicos los disfruto lo mimso o más.
      Feliz miércoles.

      Eliminar
  16. Cuando mis hijos eran pequeños disfrutábamos sin gastar dinero, lo mismo que si gastábamos. Hay muchas opciones para pasar el rato y tu lo demuestras en cada post que nos haces. A los niños hay que enseñarles que no todo vale dinero. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola.
      Eso es lo que yo he intentado, disfrutar siempre, independientemente del dinero.
      Muy feliz día.

      Eliminar
  17. Gracias Marigem, andaba yo un poco depre porque no nos van a dar este año en el trabajo, un bono de navidad con el que por costumbre contaba. En mi mente sentí que las vacaciones estarían arruinadas por esa entrada que ya no llegará. Pero me has dado ánimos de llevar a mi peque a un picnic, a jugar pelota, a lanzarle palos a nuestro cocker para que corretee y pues, qué agradecida me siento contigo.

    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Ay ese bono, que aquí llamamos paga extra da la vida.
      Noooo, las vacaciones no están arruinadas, y menos con un niño tan pequeño. Se pueden hacer muchas cosas, y con un cocker aún más. Además podéis hacer manualidades navideñas, pasear por sitios decorados de Navidad...lo vais a pasar genial.
      Feliz día.

      Eliminar
  18. Gracias Gema por estas reflexiones, a veces nos centramos más en lo que nos falta en lugar de disfrutar de lo que tenemos y en ese disfrutar de lo que tenemos y de aquellos a los que queremos eso es vivir. Ojalá aprendiéramos a valorarlo mucho más porque a veces, por desgracia, solo cuando nos falta es cuando reconocemos lo felices que nos hacía.
    Creo que es importante que los niños aprendan a valorar y eso pasa por conocer el valor de las cosas que se pueden comprar y también aquellas que no se compran ni venden y esa me parece una de las lecciones más importantes a transmitir a nuestros hijos. Esa infancia feliz, esos recuerdos compartidos, ese amor, son algo que se llevan toda la vida.
    Un beso enorme

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      A veces tardamos mucho en valorar los momentos, es cierto.
      Yo he intentao(no sé si conseguido) encontar el término medio, es decir, les he dado todo lo posible pero haciendo ver que no hace falta gastar para ser feliz. Y una nfancia feliz es un regalo, yo al menso, valoro mucho la mía.
      Muy feliz miércoles.

      Eliminar
  19. Hola Marigem

    Como siempre me ha encantado esta reflexión y añadiría que los niños disfrutan estas actividades tengan los padres más o menos dinero. Creo que no deberíamos ir solo a los parques o las playas cuando vamos escasos de fondos, porque realmente son actividades que de verdad se disfrutan, por lo general son más saludables que pasar horas sentados en una cafetería e invitan a una relajación divertida.

    Sabes que no tengo hijos, pero las actividades que mencionas son mis favoritas para realizar con amigos, o simplemente disfrutar de un momento de soledad y reflexión con migo misma, algo también muy necesario.

    Un beso muy grande, gracias como siempre por compartir tus pensamientos (Aunque sea una entrada rescatada, nos vuelve a hacer pensar ^^) y espero que estés disfrutando el puente! :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      Me alegra mucho qu ete guste la reflexión.
      Yo creo que a los niños hay que hacerles ver qu ela diversión está en compartir actividades, en hablar, reír, compartir...Obviamente todos tratamos de dar a nuestros hijos lo que necesitan y más. Yo les daba sorpresas, inventaba fiestas con regalitos, pero siempre he intentao que no asocien diversión con gastar o escasez de fondos con aburrimiento.

      Y claro que sí, estas actividades no tienen edad.
      Muy feliz miércoles y la verdad es qu ehe disfrutado el puente.

      Eliminar
  20. jamas entendere como gente que vive en zona de playa se pega meses sin pisarla!!
    besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo no podría, la necesito al menso cada semana.
      Feliz miércoles.

      Eliminar
  21. Hola, Gemma.
    No te preocupes me pasa un poquito como a ti, voy con el tiempo en mi contra.
    El dinero tiene el valor que tiene, claro que se necesita, pero no debería ser lo más importante, y a los niños sobre todo hay que enseñarles eso, vivimos en una época muy materialista, por eso deberíamos enseñarles el valor del mismo, y al final los recuerdos no se construyen con el mejor móvil, sino con las personas queridas y el tiempo que pasamos juntos. Muy buena entrada, no has cambiado nada de nada, :)
    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Irene.
      Ovbiamente sin dinero no se vive. Y yo creo, además, que está para gastar. Pero hay que saber disfrutar sin gastar. Nosotros hemos tenio veranos con muy buenos viajes, excursiones espectaculares, cenas, conciertos...y otros con salidas a la playa, tardes de picnic, exposiciones gratuitas...y en todas las ocasiones hemos disfrutado. Pero si a un niño le dices que se va al parque porque no hay dinero, enfocánddolo como una opción mala...eso no es así. Yo intento dar a mis hijos todo lo posible, especialmente en temas de estudios. Les he dao muchos regalitos sorpresa, y claro que tenían sus caprichos, pero siempre haciéndoles entender que pasar una tarde en familia, sin gastar o gastando poco, es un regalo.
      Muy feliz miércoles y me alegra que pienses que no he cambiado.

      Eliminar