Coincidencias y pintas de loca.
Hola a todos y bienvenidos un día más. ¿Qué tal ha ido el fin de semana? Espero que genial. Yo he tenido de todo,hoguera de San Juan, campo, pLaya, concierto de coro...de todo.
Hoy vengo con un poco de risa,un par de anécdotas algo tontas pero de esas que tengo por ahí, en mi memoria, y me he dicho; las voy a poner en el blog y si alguien se ríe, pues genial.
Nosotros también somos Arantxa y Guti.
Esta anécdota la tenía borrada de mi memoria y el otro día leyendo un blog la recordé.
El año pasado, un día, hablando con mi marido, le dije de broma que deberíamos vestir iguales como en su día lo habían hecho el exfutbolista Guti y su mujer Arantxa de Benito.
Justo al día siguiente teníamos un concierto del coro de mis hijos, y ese finde una comunión así que mi marido decidió comprar una camisa de camino al trabajo y salir ya vestido y duchado de allí, luego la camisa le serviría para la comunión, nos daba tiempo a lavarla y pegaba con el traje.
Quedamos en eso y en encontrarnos directamente en el concierto.
Por mi parte yo estrené una camiseta que me dio mi madre justo ese día.
Al llegar allí y vernos fue de película, íbamos idénticos; ambos llevábamos vaqueros y él una camisa y yo una camiseta verde pistacho. Lo mío tiene más explicación porque me encanta ese color y mi madre lo sabía pero él...¡él! Tiene una chaqueta verde y es lo único de ese color que le vi en 25 años.
Durante el concierto mi hermana no paraba de mandarme whatsapp en plan; Arantxa, dale recuerdos a Guti de mi parte. Menos mal que en los eventos siempre le quito el sonido.
Mi hija nos dijo que no podía dejar de mirarnos desde el escenario, era hipnótico vernos con el mismo color y el mismo look.
Obviamente, desde entonces hablamos sobre la ropa que nos vamos a poner y no he vuelto a gastar bromas sobre la indumentaria no vaya a ser que se cumplan.
En la foto parecen distintas porque una foto es a la luz del atardecer y la otra en el restaurante pero son idénticas. |
¡Vaya Pintas!
Esta anécdota la recordé le otro día leyendo el blog de Álter. Hace casi dos años iba a tener un día de relax total, o eso pensaba.
Ni mis hijos ni mi marido estaban así que a esto de las seis y media de la tarde me fui para casa y me puse unas pintas...una camiseta con manchas de tinte del pelo que uso para esos menesteres, unos leggins cortos también hechos polvo y me unté el pelo de aceite de oliva.
Normalmente lo hago de medios a puntas pero ese día lo hice en todo el pelo porque lo tenía castigado del verano.
Y me puse una mascarilla de aceite, suero y miel en la cara, también para recuperar del verano.
Y cuando estaba con mis ropas andrajosas, mi pelo grasiento, mi cara brillante y una infusión en la mano me manda un whatsapp mi hermana diciendo que ha ido con mi madre a una ruta de Gijón y que mi mami se ha caído.
Y yo, hecha una loca la llamo desde el teléfono fijo(no sé por qué no usé el móvil) y me dice que no se lo explica pero de una forma tonta mi madre se ha caído, que sangra por la cabeza y que no sabe qué hacer. Yo le digo que llame a una ambulancia pero mi madre no quiere. Entonces quedamos en que me voy a acercar hasta allí y que ya vamos decidiendo sobre la marcha.
Hecha una loca me quito parte de la mascarilla de la cara con una toallita, lo que más se veía, pero el pelo simplemente lo cogí en una coleta, sin peinar ni nada, y se veía de un grasiento...y sin pensar salí de casa sin móvil, llaves ni dinero.
Hice el trayecto corriendo, a lo que a mis pintas había que añadirle que sudaba como nunca en mi vida, y mientras me derretía envuelta en mi sudor, en aceite, restos de miel y andrajos no vi ni rastro de mi madre o mi hermana, ni ningún charco de sangre, que era lo que buscaba porque me indicaría que allí había ocurrido todo.
Desesperada empecé a buscar gente que me pudiera ayudar y sin dudar le pregunté a una mujer si había visto a una señora sangrando por la cabeza con una chica medio histérica. La pobre me miraba perpleja y me dejó su móvil, pero claro, como actualmente no marcamos los números no me sabía ni el de mi hermana ni el de mi marido ni el de nadie, así que le di las gracias pero no pude hacer nada, y con esas trazas seguí senda arriba y senda abajo esperando encontrar no sé el que.
Un buen rato después, harta de perder el tiempo volví a casa y al llegar recordé que no tenía llaves, ni móvil para llamar, ni dinero para una cabina...y esperé paseando y viendo a mucha gente conocida que sale de casa limpia y presentable y que solo te encuentras cuando tú vas hecha un cuadro.
Cuando mi marido llegó y me vio asaltarle mientras abría el portal alucinó, no sé si de mis pintas, de mi cara colorada y desesperada...
Ya en casa, junto a la infusión que no me llegué a beber, vi en mi móvil un montón de mensajes diciendo que habían llevado a mi madre en un coche a un centro de salud y allí le habían curado y cosido la herida.
Lo bueno es que mi madre al final se recuperó bien pero mi tarde tranquila y feliz se convirtió en una carrera sin sentido, como pollo sin cabeza, con unas trazas terribles que todos mis conocidos vieron, asaltando a desconocidos con pintas de loca y demostrando al mundo que no me sé ni los teléfonos de mi familia.
Eso sí, la ducha esa noche me supo a gloria aunque me costó arrancarme los restos de mascarilla de miel de la cara y el aceite reseco del pelo.
Bueno, pues hasta aquí el post de hoy. Qué sí, que vaya tonterías que cuento pero ya que casualmente los recordé...y en mi casa aún se siguen riendo de mí porque lo de salir sin llaves tiene delito.
Muchas gracias por leerme y muy feliz semana a todos.
Muchas gracias por leerme y muy feliz semana a todos.
Jajajaja La primera me ha encantado. A mi me pasa con Manolo, que por la mañana entramos a horas diferentes y a veces me lo encuentro en el centro y vamos los dos de rojo y vaquero, celeste y claro...
ResponderEliminarBesitos.
Jajajaja. Nosotros estábamos ridículos, y toda la familia allí viéndonos.
EliminarBesos.
Buenos días guapa! Ay, menudas anecdotas, lo he pasado mal con la segunda, imaginandote tan agobiada y sin saber que hacer. Lo de la ropa no me ha pasado nunca, pero tiene que ser curioso ir vestidos iguales :P
ResponderEliminarUn besito y feliz semana!
¡Hola!
EliminarCon la segunda me rio ahora pero en el momento lo pasé fatal, y con aquellas pinas qu eme imagino que la gente se asustaba al verme.
Lo de ir vestidos iguales es muy raro, yo me sentía ridicula.
Besos.
No sé si cogerme un día de relax para recuperarme del estrés que me ha provocado la anécdota de tu madre. :)
ResponderEliminarUn abrazo, Arantxa (digo Marigem).
Jajajaja, a mi madre le digo qu eme debe como mínimo un spa, porque menudo trago, jejeje.
EliminarBesos.
Salir como las locas porque un ser querido te necesita es más que disculpable. No eres la primera ni serás la última.
ResponderEliminarBesos!
Jajaja, muchas gracias. Ahora me río pero en su momento sufrí mucho.
EliminarBesos.
Me ha encantado la primera, la verdad es que apetece empezar con risas la semana. Un beso
ResponderEliminarJajaja, muchas gracias.
EliminarBesos.
menos mal que a tu madre la atendieron y que al final no fue grave. si la gente te vio sin estar del todo arreglada... peor para ellos.
ResponderEliminaraunque en cierto modo te comprendo. yo cuando voy en verano con camiseta, bermudas, etc. tengo un imán para encontrarme con compañeros de mi colegio y otro tipo de gente que no me apetece que me vean con ese tipo de ropa. ^_^
lo de ir con el mismo look tu marido y tú es bueno, denota compenetración. ;)
besos!!
¡Hola!
EliminarSi, al final todo quedó en un susto pero vaya trago.
Jejeje, es que no es que me viesen sin estar del todo arreglada, iba andrajosa literalmente,con el pelo supersupergrasiento y la gente no se imagina que es aceite, la cara con restos de aceite y miel y sudando, además de llevar cara de loca, jejeje.
Pues yo creo que ir en bermudas y camiseta en verano está genial, no vas a andar por ahí achicharrado, pero entiendo lo que dices, a esos mejor verlos cuando vamos de unta en blanco.
Besos y feliz martes.
Menos mal que a tu madre no le pasó nada pero tuvo que ser horrible, no saber lo qué le había pasado ni posibilidad de saberlo y encima encontrarte tirada en la calle. Lo de las pintacas es un plus claro...
ResponderEliminarBesos
Siiii, ahora me río pero vaya mal que lo pasé, quería llorar y no podía de la angustia, ufffff.
EliminarLas pintacas eran indescriptibles.
Besos.
Aquí llevamos dos semanas de aupa... espero vovler a la rutina mañana..
ResponderEliminarOjalá hayas vuelto ya a la rutina, yo también estoy en racha.
EliminarBesos.
Hola Gemma, vaya anecdotas,la que me ha gustado es la primera, que casualidad ir vestidos igual, ejejejje, a mi no me ha pasado. Y la segunda anecdota ahora te ries pero lo pasaste fatal. Besitosss
ResponderEliminarJajaja, qué suerte que no te haya pasado, a nosotros solo esa vez pero estaba mi madre, mi tío, mi hermana, mis suegros, mis hijos y sus amigos...a lo grande, jejeje.
EliminarUffff, con la segunda me río ahora pero vaya trago.
Besos.
Me has hecho reír, sobre todo con la primera, me imagino tú cara al ver a tú marido vestido de idéntico color jejee, y sobre todo el apuro de que todo el mundo te miré y encima te comparen con Arantxa y Guti jejee.
ResponderEliminarEn cuanto a la segunda, imagino el susto que te tuviste que llevar, y es lógico que salieras con esas pintas, sin móvil,sin llaves y sin nada, es la reacción lógica ante algo así, de modo que las pintas que pudieras llevar es lo de menos.
Besos y buena semana y se agradece echarle unas risas al lunes.
Hola Tere.
EliminarJajajaja, es que había demasiada gente conocida y claro, las miradas de perplejidad eran evidentes.
Con la segunda lo pasé fatal, es que no sabía ya ni donde ir ni como ni a quien llamar...horrible.
Besos.
menos mal que lo de tu madre se solucionó sin más dramas. Eso es lo importante. Lo otro sirve para saber que cuando más felices te las prometes y más relax esperas, más se puede torcer todo y desembocar en una locura sin sentido. Yo me he visto en alguna situación similar y con mi despiste, lo de olvidarme llaves, movil y dinero, está a la orden del día.
ResponderEliminarUn beso.
Hola.
EliminarSi, al final se solucionó bien, hubo que coser y curar pero bien.
Totalmente, me imaginaba una tarde de spa y casi me da un infarto.
Yo también me he olvidado las llaves muchas veces, pero esta fue de record.
Besos.
Jaja, creo que la primera la has recordado por mi blog, ¿puede ser?
ResponderEliminarY la segunda... pobre mujer cuándo le preguntaste si habías visto a una mujer sangrando por la cabeza con otra histerica... ¿qué pensaría? jaja
Jajaja, si, fue en u blog, acabo de recordarlo, debería haberte enlazado pero no me acordaba exactamente.
EliminarAy la segunda, la mujer me miraba perpleja y cuando me dio el móvil tuve la sensación de estar atracándola, jejeje, me lo dio con una sumisión un tanto rara, no quiero saber qué pensaba.
Besos.
Desde luego daría gusto escuchar la versión de la mujer que te ofreció el móvil, je, je, je... Lo raro es que no aprovechara el dártelo para salir corriendo. Dos anécdotas muy divertidas, de esos momentos que son los que de verdad nos hacen sentir vivos, aun a pesar del sofoco del momento. Un abrazo!!
ResponderEliminarJajaja, la pobre estaba entre perpleja y asustada, no quiero saber qué pensaba. Yo creo que no salió corriendo por si la perseguía, como me vio llegar corriendo supondría(equivocadamente9 que soy rápida.
EliminarUn abrazo y feliz martes.
Vaya susto lo de tu madre, menos mal que se solucionó bien, pero es normal que salieras corriendo, con las pintas que llevases jaja
ResponderEliminarSiempre viene bien recordar estos momentos!! Me he reído con lo de Arantxa y Guti!!!!
Un besote guapa
Siiii, es normal pero es que si me hubieras visto..terrible.
EliminarMe alegra que te rieras.
Besos.
¡Qué barbaridad!...y a eso súmale la histeria de no saber qué le ha pasado a tu madre..xD.
ResponderEliminarJusto, a eso le añades la histeria y no sé que parecía.
EliminarBesos.
Lo de ir iguales mi marido y yo no creo que ocurra nunca, porque a mí me gusta la ropa con muchos colores y estampados y a mi marido lo más llamativo que se ha puesto ha sido la camiseta roja de un equipo de fórmula 1.
ResponderEliminarLo de salir escopeteada por una urgencia, por desgracia, me ha pasado más de una vez y puede que por experiencia siempre lo hago con el kit completo: móvil, llaves coche y casa, documentación y dinero en efectivo. Es como un resorte que se activa en mi cabeza y me hace coger las cosas imprescindibles. En cambio, ese resorte no me recuerda que no debo salir a la calle con las zapatillas de andar por casa...
Gracias por compartir esas anécdotas.
Un besote.
Jajajaja, yo la de la fórmula uno la tenía azul, y mira ahí íbamos los cuatro iguales, jejeje.
EliminarQué bueno que se te active ese resorte, yo siempre que salgo escopeatada salgo sin lo necesario, y para colmo muchas veces en zapatillas de andar por casa. Ese día supongo que me cambié el calzado pero curiosamente no lo recuerdo.
Besos.
Que el susto se convirtiera en una anécdota tan graciosa y digna de rememorar es sin duda uno de los efectos secundarios de vivir ^-^
ResponderEliminar¡SE MUUUY FELIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIZ 💛!
Ay me encanta la frase, me la apunto.
EliminarBesos.
Es que esas anécdotas nunca se debe de olvidar, sobre todo lo de salir vestidos iguales. Eso es que sois muy parecidos. Y lo de tu madre menos mal que la curaron y no pasó nada más. Cuando una se relaja pasan las cosas y hay que salir corriendo y no me extraña nada que se te olvidan todo y verte desprotegida sin movil, dinero, etc, y seguro con con zapatillas de casa. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Mamen.
EliminarOye pues va a ser que sí que somos parecidos.
Lo de mi madre me hace gracia ahora pero lo pasé fatal, vaya trago. Curiosamente no recuerdo qué calzado llevaba.
Besos.
Hola Mari, yo aquí tomandome un respiro de tanto quehacer y mira que bien me ha caído, me he reído como nunca jajaja es que a ti te pasa de todo.
ResponderEliminarLa primera estuvo divertida pero con la segunda me partía de risa jajaja como de película/comedia, todo lo malo que podía pasar pasó. Lo bueno es que tu Mami estaba bien, con golpe y todo pero la curaron, lo que hace que la historia sea divertidísima
Mil Besitos!!
Jajajaja, me alegra mucho que te rieras.
EliminarSi, todo lo malo pasó, jejeje. Mi madre se curó que es lo importante.
Besos guapa y feliz martes.
Hola Gemma,
ResponderEliminarYo tampoco recuerdo haberme vestido igual que mi pareja, pero eso es que tenéis muy buena sintonía, jeje Vaya miedo debiste pasar con tu madre, por eso te olvidaste de todo, suerte que al final no fue tan grave. Lo de las pintas, me recuerda a que siempre que llego a casa me pongo como una andrajosa sin ton ni son, pero es como más cómoda se está, :) Ahora quizás me acicale más, por si acaso, jajaja
Un besote.
Hola.
EliminarJajaja pues al final va a resultar que tenemos buena sintonía, jejeje.
Con lo de mi madre lo pasé fatal, y yo no siempre me pongo andrajosa, si tengo que salir luego pues no, pero aquel día era de relax en plan spa, con mascarillas...y mira.
Besos.
Uff q apuro, a veces pasa cada cosa q es tremenda
ResponderEliminar