sábado, 30 de noviembre de 2013

Estoy de nuevo aquí!!!!!!!!!!!



 
Me encantan los atardeceres de invierno, huelen a frío y promesas.
Hola chicas!!!!!!!! Ya sé que llevo un montón de tiempo sin actualizar, y no sabéis la rabia que me da, con lo que me gusta a mí explicar mis cositas aquí y compartir mis pensamientos con todas vosotras. La verdad es que no pude actualizar por falta de tiempo, he estado liadísima, y para rematar tengo a mi padre ingresado, y aunque ya está mucho mejor, y probablemente la semana que viene le den el alta, no he tenido tiempo de nada. Yo no sé cómo es en otros sitios, pero aquí en Gijón los médicos hablan con los familiares tres días a la semana a partir de la una de la tarde, pero siempre se tarda mucho y se acaba después de las dos de la tarde, tras pasarse la mañana en el hospital, y eso para saber como está. Y claro, por las tardes se intenta acompañar un poco al enfermo, y aunque nos turnemos se pasa uno los días de arriba pa abajo. Entre eso, mis propias cosas y que no tenía mucho ánimo al principio, he tenido al pobre blog de lo más abandonado. Pero sí que me he pasado por los vuestros, por los que de verdad me gustan. He seguido las aventuras de Angy por “los extranjeros” como decían antes, he visto las ideas de Saandry(lo de la hucha yo también lo hacía, un día lo cuento con calma), he visto las fotos chulas de Sola ante el espejo, me he reído con nuestra amiga de la isla de Grande Jatte, a la vez que me llamaba la atención los gustos en común, sobre todo paisaniles, como dice ella, he babeado con las recetas de Anyol, me he emocionado con la boda de la hermana de Noelia Entrerríos , he leído a Yolanda de Somos bellas si queremos serlo, me encantó lo último, el artículo de Irene Villa y he leído os consejos de mamás de Carmen Osorio, he visto las cosas que hace Sonia Soria que son una preciosidad,. Vamos, que he seguido vuestras vidas a través de mi pantalla. Menudo rollo, pero que sepáis que los leo todos, aunque no comento, y leo estos y alguno más que seguro que se me olvida, pero a ratitos perdidos voy leyendo para estar al día de vuestras cosas.
Y ahora para no aburriros vuelvo a lo de siempre. Hace mucho que no hablaba de mis cenas especiales, aunque si queréis recordar podéis leerlas aquí Aquí y íAquí   Estos últimos días no hemos hecho demasiadas, porque el tema hospital nos lo ha dificultado, y por cuestión de horarios con mis hijos, que han tenido algún compromiso de viernes, y aunque cuando eso sucede  pasamos la cena al sábado, esta vez lo hemos dejado así y  hemos hecho solo algunas cenas, pero todas han sido momentos buenos y entrañables. No he querido dejar de hacerlas por varias razones, la primera para no preocupar más a mis hijos, que bastante sufren por su abuelo, y creo que dando sensación de normalidad siempre se llevan las cosas mejor, y como son mayores lo pasan peor, no es como cuando eran pequeños, pero si a mí me ven bien y haciendo planes se dan cuenta de que las cosas no van tan mal, y la segunda razón es, aunque parezca paradógico, para facilitar también las cosas a mis padres. Me explico; por un lado, mi madre viene a las cenas y se distrae, que al principio estaba empeñada en que la engañábamos y era peor de lo que decíamos, y así, al menos mientras me ayuda y cenamos pasa un rato entretenida. Y mi padre se queda más tranquilo sabiendo que en casa todo marcha bien, y yo no quiero que una persona esté en el hospital preocupado por cómo van las cosas en casa, así que hicimos alguna cena y le enseñamos las fotos, y se tranquiliza al ver que todo está bien y él allí solo tiene que pensar en recuperarse, en nada más.
Con ilusión todo parece mejor.

Bueno, pues os diré que una de las cenas que preparamos fue la de Halloween. Ya sé que es muy tarde para hablar de ella, ha pasado un mes, pero tal vez estas ideas puedan servir a alguien para el año que viene, y si no, pues al menos nos entretenemos un ratito juntos.
Esta vez quise simplificar el menú y hacer cosas aparentes pero que pudiese dejar adelantadas  para preparar cuando volviese a casa, así que hice un pincheo en plan merienda cena, aunque por la hora en que comimos ya fue cena.
 
Las patatas del Lidl son las del plato blanco, sabían genial, y las tortiillas con su etiqueta molaban.
Por un lado hice tortillas, tres, dos sin cebolla y una con cebolla, pero las hice chiquititas. Y las adorné con unos palillos a los que les había pegado unos dibujitos que imprimí y coloreé.
Parece mentira que esas botellas guardasen salsa de tomate solo unos días antes. Ese día tenían cola y te´al limón.

Por otro lado usé un aparatito que tenía desde el verano que me dieron con paté, y sirve para hacer rollitos de pan de molde con paté, y los rollitos los corté y los puse en una bandeja dorada donde previamente había puesto una plantilla de calavera, así ya teníamos una calavera. Explicado así puede sonar raro pero quedó bien.

 
Lo que vemos al fondo en bandeja dorada es una calavera de paté, en la realidad tenía mucho mejor aspecto.
Con pan de molde y chorizo de pamplona hice una especie de cementerio, cortando las rebanadas en forma de lápida. Estas cosas se pueden dejar hechas y se gana mucho tiempo.
Aquí el cementerio de chorizo en plena elaboración.

Las croquetas eran de queso y las dejé formada y rebozadas así que las freí al llegar en un momento y les puse palillos como los de las tortillas. 
Los sandwichs en la plancha se hacen volando.

En el Lidl compré unas patatas especiales de Halloween, tenían forma de calaveras y fantasmas, y aunque no eran de lo más saludable estaban muy buenas, y un día es un día.
Con palitos de pan (que no sé como se llaman) y jamón York hice escobas de bruja, y con el jamón sobrante, el pan de molde sobrante y las lonchas de queso que me sobraron de las croquetas hice sándwich, los hice en la plancha de cuatro en cuatro en un momento.
Las escobas de bruja.

Como dulce preparé unas mandarinas que previamente   había vaciado y pintado como calabaza, las rellené con lacasitos y quedaron muy monas. Y por otro lado, cogí un tarro vacío que decoré con un dibujo coloreado por mí y le puse en el fondo puse un poco del papel naranja que meten en los paquetes de regalo de Mercadona. En unas servilletas de papel pinté unos ojos y boca de fantasma y envolví con ellas unos chupa chups y unas piruletas y quedaron muy bien, en plan minifantasmas.
Vasos y pajitas handmade.

Este año no decoramos la casa como otras veces, pero hice unos servilleteros de murciélago, adorné unas pajitas también con murciélagos, pinté vasitos de plástico, metí las bebidas en botellas de tomate limpias y con unos dibujos de Halloween para que pareciese veneno y puse algunos detalles en la mesa que hicieron que la noche fuera especial a pesar de todo.
Las mandarinas con lacasitos, un clásico en mi casa.
 
El próximo día pongo fotos donde salgan también las piruletas y donde se vea mejor.
Y ya para ir acabando os diré que otro de los días hicimos la cena temática de Asia. Casi todos los años cae cena asiática, pero vamos variando el menú, así que este año hicimos pollo al limón(receta de Isasaweis) con arroz basmati, y de postre pan de gambas. No me compliqué nada, las pechugas estuvieron toda la tarde en “remojo” en salsa de soja y limón, las freí como indicaba la receta y preparé la salsa tal como ella lo explica. El arroz lo hice como aprendí hace años, remojándolo un poco, poniéndolo a hervir con agua a partes iguales y cuando ya está le echo mantequilla para que se vaya derritiendo. Es una cena que está muy rica y no es complicada, así que todo son ventajas, jeje.
El arroz está borroso, pero estaba riquísimo y las pechugas sabían genial.



Ya para acabar me gustaría compartir una de mis reflexiones, que no deja de ser un poco lo de siempre. Creo firmemente, cada vez lo creo más, que hay que ser optimista, los problemas siempre tienen solución y si pensamos con calma y buscamos el lado bueno de las cosas, al final se sale de todo, o de casi todo. Y no solo eso, sino que mientras está sucediendo no lo pasamos tan mal. Se sufre, eso es lógico, pero es un sufrimiento más llevadero porque sabemos que al final del camino hay luz y esperanza.
Bueno chicas, ya no me enrollo más, ahora en serio, os deseo a todas un muy buen fin de semana y espero actualizar de nuevo con frecuencia, que las Navidades están a la vuelta de la esquina, de hecho, en algunas calles, cuando anochece, ya empieza a oler a Navidad, y hay que vivir esos días con felicidad, no hace falta gastarse un dineral en la cena de una sola noche, pero hay que intentar ser felices, poner ilusión en las cosas y disfrutar de los nuestros, que es lo mejor que tenemos. Besinosssss y os sigo leyendo.